INTRODUCCIÓN LAP03 - Contenido educativo
Ajuste de pantallaEl ajuste de pantalla se aprecia al ver el vídeo en pantalla completa. Elige la presentación que más te guste:
Gestionar el stock, a primera vista, parece fácil, ¿no?
00:00:05
Simplemente tener productos disponibles para venderlos.
00:00:07
Pero en realidad es uno de los rompecabezas más grandes
00:00:10
a los que se enfrenta cualquier empresa.
00:00:12
Y es que tener demasiado es un problemón.
00:00:14
Y claro, tener demasiado poco, también.
00:00:16
Venga, vamos a ver cómo se las apañan las empresas
00:00:19
para caminar por esa delgada línea.
00:00:20
A todos nos ha pasado.
00:00:23
Vas a la tienda o entras en la web
00:00:24
con toda la ilusión a por ese producto que te encanta
00:00:26
y ¡zas! Agotado.
00:00:28
Esa frustración que sentimos como clientes
00:00:31
es solo la punta del iceberg de un desafío logístico gigantesco. Es, literalmente, una
00:00:33
batalla que se libra cada día en almacenes de todo el planeta. Y aquí es donde empieza el lío. Es que
00:00:38
es un dilema con dos caras, a cual peor. Por un lado, si acumulas demasiado stock, tienes un montón
00:00:44
de dinero durmiendo en las estanterías. Dinero que no puedes usar para otra cosa. Además, pagas
00:00:50
un dineral por almacenarlo y te arriesgas a que se te estropee o, peor aún, que pase de moda. Pero
00:00:55
por otro lado, si te quedas corto, pues pierdes ventas, cabreas a la gente y en el peor de los
00:01:01
escenarios puedes llegar a parar la producción por completo. Es que es como ser un funambulista,
00:01:05
¿verdad? Caminando constantemente por la cuerda floja. El objetivo final no es tener el almacén
00:01:10
a reventar de producto. Para nada. El truco está en tener la cantidad justa en el momento preciso.
00:01:15
Esa es la gran paradoja del stock. Y claro, resolverla es la diferencia entre el éxito y
00:01:20
el fracaso. Vale, entonces, ¿qué pasa si te equivocas en este equilibrio tan delicado? Pues
00:01:25
que las consecuencias económicas son muy muy reales. Y no hablamos sólo del valor de la
00:01:31
mercancía. Hay toda una serie de costes ocultos, de esos que no se ven a simple vista. A ver,
00:01:36
para entenderlo bien, vamos a desglosar estos costes. Digamos que hay tres grandes grupos.
00:01:41
Primero, los costes de adquisición, que es básicamente lo que pagas por comprar la
00:01:46
mercancía. Sencillo. Segundo, los costes de posesión, o sea, lo que te cuesta tener ese
00:01:50
producto guardado. Y tercero, el que nadie quiere tener, el coste de rotura de stock, el precio de
00:01:55
no tenerlo cuando alguien lo quiere. Y ojo con los costes de posesión, porque la gente piensa que es
00:02:01
sólo el alquiler del almacén. Y para nada. Pensemos un momento en todo lo que entra aquí. El seguro por
00:02:06
si hay un robo o un incendio, los sistemas de seguridad, los sueldos del personal que lo
00:02:12
gestiona y el gran riesgo fantasma, que ese producto pierda valor, ya sea porque se daña
00:02:16
o simplemente porque se queda obsoleto. Y para que nos hagamos una idea de la magnitud de la
00:02:21
que hablamos, el gasto en compras de una empresa puede llegar a representar entre el 30 y el 70%
00:02:25
de sus ventas. Con esas cifras sobre la mesa, gestionar bien estos costes no es que sea una
00:02:31
buena idea. Es que es una cuestión de supervivencia. Pero, de los tres, el coste de rotura de stock,
00:02:36
ese es el más peligroso de todos. ¿Y por qué? Porque su verdadero impacto es muy difícil de
00:02:43
medir. El problema no es la venta que has perdido hoy, no, no. El coste real, el que de verdad hace
00:02:48
daño, es que ese cliente probablemente no vuelva más. Es un golpe silencioso a la reputación de
00:02:53
la marca que a veces ni todo el dinero del mundo puede arreglar. Vale, el panorama es complicado.
00:02:58
Entonces, ¿cómo se le mete mano a todo este lío? Pues la primera estrategia, y la más inteligente,
00:03:04
es priorizar. Porque, seamos sinceros, no todos los productos son igual de importantes, así que no
00:03:08
todos pueden recibir la misma atención. Y aquí es donde entra en juego una idea que seguro que a
00:03:14
muchos les suena, el principio de Pareto, o como se le conoce popularmente la regla del 80-20. La
00:03:18
idea es súper simple pero muy potente. En casi todo, el 80% de los resultados viene del 20% de
00:03:24
las causas. Y si lo llevamos al inventario, ¿qué significa? Pues que un puñadito de productos son
00:03:29
los que generan la mayor parte del valor para la empresa. Y esto, en la práctica, se traduce en
00:03:33
una clasificación súper útil, la clasificación A, B, C. Fijaos bien, los artículos de clase A son
00:03:38
los VIPs, los importantes. Son pocos, pero concentran casi el 80% del valor del inventario.
00:03:45
Luego tenemos la clase B, que está ahí en medio. Y finalmente la clase C, que son la inmensa mayoría
00:03:50
de los productos, pero que todos juntos apenas suman un 5% del valor total. Sabiendo esto,
00:03:55
la estrategia es lógica, a cada uno lo suyo. A los artículos A, los que más valen, hay que
00:04:01
vigilarlos de cerca. Un control súper estricto, revisiones constantes, no se puede escapar ni
00:04:06
una. ¿Con los B? Bueno, un control normal, con revisiones periódicas es suficiente. ¿Y con los
00:04:12
C? Pues aquí nos relajamos. Como valen poco, los controles son mínimos y se piden en grandes
00:04:17
cantidades para no tener que estar pendientes. Se trata de poner la energía y los recursos donde
00:04:21
de verdad importa. Perfecto, ya sabemos en qué productos tenemos que poner el foco. Pero ahora
00:04:26
vienen las dos preguntas del millón en el mundo de la logística. ¿Cuánto hay que pedir de cada
00:04:31
cosa y, casi más importante, cuándo hay que pedirlo. Para responder al cuánto, hay un modelo clásico
00:04:36
que se llama lote económico de pedido. La lógica es puro equilibrio. Mirad, si haces muchos pedidos
00:04:42
pequeños, gastas un montón en gestión, en papeleo, en envíos, pero si haces un pedido gigantesco,
00:04:48
entonces se te disparan los costes de tenerlo todo guardado en el almagén. Bueno, pues el lote
00:04:55
económico es justo ese punto intermedio, ese punto dulce donde el coste total es el mínimo
00:05:00
posible. Pero de nada sirve saber la cantidad perfecta si luego pides tarde. El cuándo es igual
00:05:06
de crucial que el cuánto. Aquí el timing lo es absolutamente todo si no queremos quedarnos con
00:05:11
las estanterías vacías. Y para solucionar esto se utiliza lo que se llama el punto de pedido. Es
00:05:15
un concepto muy sencillo. Es como la luz de la reserva de la gasolina en el coche. Se define un
00:05:21
nivel mínimo de existencias y en el momento en que el stock baja de esa línea roja, ¡pum!, se lanza
00:05:26
un nuevo pedido automáticamente. La idea es que el nuevo material llegue justo cuando el viejo se
00:05:31
está acabando. Claro que, como la vida real está llena de imprevistos, siempre hay que tener un
00:05:36
plan B. Y ese plan B es el stock de seguridad. Es básicamente un colchón de emergencia. Un poquito
00:05:41
de inventario extra guardado por si las mascas. ¿Para qué? Pues para cubrirte si un proveedor
00:05:47
se retrasa o si de repente hay un pico de demanda inesperado. Podríamos decir que es el seguro de
00:05:51
vida de cualquier almacén. Al final, como vemos, no hay una única varita mágica para esto. Dominar
00:05:56
el arte del stock consiste en saber combinar todas estas herramientas, todas estas estrategias,
00:06:02
para construir un sistema que sea a la vez fuerte y capaz de adaptarse. Así que resumiendo, el kit
00:06:07
de herramientas del buen gestor de stock tendría esto. Primero, el método ABC para saber dónde
00:06:13
poner la atención. Segundo, el lote económico para pedir la cantidad justa y ser eficiente. Tercero,
00:06:19
el punto de pedido para clavarlo con el cuándo. Y cuarto, el stock de seguridad como colción.
00:06:25
Con estas cuatro cosas, la gestión de inventario deja de ser un juego de azar y se convierte en
00:06:31
algo mucho más parecido a una ciencia. Y es que, como decía el gran Peter Drucker,
00:06:35
donde hay una empresa de éxito, alguien tomó alguna vez una decisión valiente. Y no nos
00:06:40
engañemos. Decidir cuánto dinero inmovilizar en un almacén y en qué productos es sin duda
00:06:45
una de las decisiones más estratégicas y más valientes que se pueden tomar en un negocio.
00:06:50
Y esto nos lleva a una última reflexión de cara al futuro. Ahora que la inteligencia artificial es cada vez mejor prediciendo lo que vamos a querer comprar, incluso antes de que nosotros mismos lo sepamos, ¿será posible que lleguemos a un punto en el que la gestión de stock sea tan perfecta que ese cartel de agotado se convierta en una reliquia del pasado? Ahí queda la pregunta.
00:06:55
- Materias:
- Marketing
- Etiquetas:
- Porfolio
- Niveles educativos:
- ▼ Mostrar / ocultar niveles
- Formación Profesional
- Ciclo formativo de grado básico
- Primer Curso
- Segundo Curso
- Ciclo formativo de grado medio
- Primer Curso
- Segundo Curso
- Ciclo formativo de grado superior
- Primer Curso
- Segundo Curso
- Ciclo formativo de grado básico
- Subido por:
- Cristina B.
- Licencia:
- Reconocimiento - Compartir igual
- Visualizaciones:
- 1
- Fecha:
- 1 de diciembre de 2025 - 12:02
- Visibilidad:
- Clave
- Centro:
- IES ISLAS FILIPINAS
- Duración:
- 07′ 20″
- Relación de aspecto:
- 1.78:1
- Resolución:
- 1920x1080 píxeles
- Tamaño:
- 43.18 MBytes