Saltar navegación

Activa JavaScript para disfrutar de los vídeos de la Mediateca.

BOOKTUBER RUBEN 2

Ajuste de pantalla

El ajuste de pantalla se aprecia al ver el vídeo en pantalla completa. Elige la presentación que más te guste:

Subido el 20 de octubre de 2018 por Álvaro S.

11 visualizaciones

Descargar la transcripción

Hola chicos, ¿qué tal estáis? Yo muy bien. Os voy a contar el libro del rey Midas. 00:00:00
A mí me ha gustado mucho y os lo voy a contar. 00:00:06
Había una vez un rey que se llamaba Midas y a su hija no le gustaba eso del oro 00:00:08
porque era muy rico ese rey, pero nunca se quedaba satisfecho con todo su oro. 00:00:18
y todos los días no podía estar con su hija 00:00:26
porque tenía su trabajo de contar cuántas monedas de oro tenía en sus cofres secretos. 00:00:32
Su hija pasaba el tiempo en los rosales que había, 00:00:38
con un colibrí y en una fuente. 00:00:44
Y un día cuando el rey seguía contando sus monedas de oro, 00:00:48
Dijo, ¿por qué uno más uno son dos y no doscientos o dos mil o dos millones? 00:00:54
Y de repente una voz extraña dijo, pobre rey Midas. 00:01:02
Al verlo pidió a los guardias, pero repitió otra vez, pobre rey Midas, 00:01:08
No se ha dado cuenta de que nadie está aquí, pero él insistía diciendo, guardias, guardias. 00:01:15
Y pensó que porque estaba ahí, que era pobre y quería dinero, pero no era por eso. 00:01:25
Había aparecido así, por así, y le había dicho que le quería ayudar. 00:01:35
y le ayudó y dijo que todo lo que tocase se podía convertir en oro. 00:01:41
De repente quiso decirle, ¿y tú quién eres? 00:01:49
Pero no le dio tiempo más porque desapareció. 00:01:54
Así que tocó la lámpara que había en el techo y se convirtió en oro. 00:01:58
Luego tocó un vaso grande y se convirtió en oro. 00:02:04
Pero luego subiendo la barandilla o las escaleras también se convirtieron las dos cosas en oro 00:02:09
y ya no le tenía envidia al sol por sus rayos de luz. 00:02:18
Le dijo, ya no te tengo envidia porque ahora tengo mucho más oro que tú. 00:02:25
Y pidió rápido a los guardias que quería comida, pero nada más tocarlos se convirtieron en oro la comida. 00:02:29
Pidió más comida, pero se convirtió también en oro. No valía la pena. 00:02:43
Se fue a los rosales y a la fuente donde estaba la léndula y tocó los rosales y la fuente y se convirtieron en el oro. 00:02:48
Cuando pasó por ahí cada léndula no se lo creía. 00:03:01
Mientras tanto el pobre rey Midas se quedó muy triste porque no podía comer nada ni podía tocar nada. 00:03:05
Cuando se enteró Calendula fue rápido a su padre llorando 00:03:15
Diciendo, papá, los rosales, la fuente 00:03:22
Pero no pudo decir mucho más porque la abrazó y se convirtió en oro 00:03:25
Así que se fue del castillo El Rimidas a un lago que había cerca 00:03:31
y volvió a aparecer ese chico y le dijo, oh pobre rey Midas, y le dijo, ¿qué hago? 00:03:39
He convertido a mi hija en oro. 00:03:50
Todo achate un poco. 00:03:54
Tocó el lago y no se convirtió en oro. 00:03:56
Todas las cosas que había tocado ya estaban otra vez en su color normal y color incolorado. 00:04:00
Este punto está apagado. 00:04:07
Ahora voy a hacer el switch 00:04:08
Perfecto 00:04:09
Subido por:
Álvaro S.
Licencia:
Reconocimiento - No comercial - Compartir igual
Visualizaciones:
11
Fecha:
20 de octubre de 2018 - 21:18
Visibilidad:
Público
Centro:
CP INF-PRI ARCIPRESTE DE HITA
Duración:
04′ 15″
Relación de aspecto:
0.55:1
Resolución:
352x640 píxeles
Tamaño:
67.81 MBytes

Del mismo autor…

Ver más del mismo autor


EducaMadrid, Plataforma Educativa de la Comunidad de Madrid

Plataforma Educativa EducaMadrid