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El Cid: segunda parte - Contenido educativo

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Subido el 20 de julio de 2023 por Raul G.

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En realidad el segundo cantar, cantar de las bodas, sobre todo nos cuenta la conquista de Valencia 00:00:00
Pero mira una cosa que hace el Cid 00:00:04
De todo lo que va conquistando, desde el principio, de todas sus riquezas 00:00:05
Siempre guarda una parte para su señor 00:00:09
Y cuando junta lo suficiente se la envía con algunos emisarios a Castilla para dársela 00:00:13
Y tú dirás, pero para que haga eso tiene que estar desterrado 00:00:18
Porque el Cid es un buen noble y cumple con sus obligaciones como noble 00:00:20
Aunque ha sido desterrado, él sigue siendo un buen vasallo 00:00:23
Su señor no será un buen señor, pero él sí es un buen vasallo 00:00:28
Así que le envía presentes cada vez más lujosos 00:00:31
Ten en cuenta que lo que gana un soldado es el botín de la batalla 00:00:36
Caballos, oro, espadas, de ahí viene la palabra sueldo, por cierto, de soldado 00:00:38
Lo que ganaba un soldado 00:00:43
Cuando ya le envía el tercer presente, el Cid ya es señor de Valencia 00:00:46
Es un noble importantísimo, salió siendo un pequeño noble 00:00:51
Gobierna un traitor enorme, tiene muchos vasallos a su cargo 00:00:55
El rey entonces decide hacerle concesiones 00:00:58
Primero deja que su familia, las hijas y esposa del Cid 00:01:01
Llamadas, por cierto, la esposa doña Jimena y las hijas doña Elvira y doña Sol 00:01:05
Se reúnan con él en Valencia 00:01:10
Y poco después se dirige el propio rey y solemnemente lo perdona 00:01:13
En ese momento dos nobles, los infantes de Carrión 00:01:19
Proponen casamiento con las hijas del Cid 00:01:23
Y el rey que le parece una buena idea 00:01:26
Convence al Cid que no le parece tan buena idea 00:01:29
Para que acepte tal casamiento 00:01:32
Fijaos lo que ello supone 00:01:34
Partir de noble de baja cuna, un simple hidalgo 00:01:35
A que sus hijas se casen con nobles de la más alta estirpe 00:01:39
Y ya vamos con lo último, el cantar de la Frenta de Corpes 00:01:47
Mira tú que todo parece estar babuti 00:01:49
Porque tenemos al Cid, que bueno, se ha reconciliado con su señor 00:01:51
Va a casar a sus hijas con nobles muy altos 00:01:54
Oye, que más quieren más de todo babuti 00:01:56
Además es señor de un territorio muy importante 00:01:58
Estando así las cosas, un buen día 00:02:02
El Cid está descansando tranquilamente en un salón 00:02:05
Era costumbre que hombres de confianza 00:02:08
Velaran el sueño del señor 00:02:11
Es decir, lo protegían mientras dormía aunque no fuera necesario 00:02:13
Es un signo de cortesía 00:02:16
En este caso se les concede tal honor 00:02:18
A los infantes de Carrión 00:02:20
Que ya se han casado, por cierto, con las hijas del Cid 00:02:21
Mira tú por donde en esa misma sala había un león 00:02:25
Un leoncete, ahí encerrado 00:02:27
Y tú dirás, pero ¿qué hace un león ahí en Valencia? 00:02:29
Bueno, pues todas las cosas de los nobles 00:02:31
Entonces, en un momento dado 00:02:33
Ocurre que el león se ha escapado 00:02:35
Los infantes de Carrión, ante este hecho 00:02:39
Defienden al Cid 00:02:41
¡No! 00:02:43
Salen huyendo 00:02:44
¡Cobardemente! 00:02:45
Cuando llegan los hombres del Cid 00:02:46
Alertados por el ruido 00:02:48
Se encuentran uno de ellos debajo de la cama del Cid 00:02:50
Y al otro que se ha metido en una cuba 00:02:53
Donde está la uva pisada para hacer el vino 00:02:55
¡Ay, qué vergüenza, por Dios, qué humillación! 00:02:58
El Cid, entretanto, se despierta 00:03:00
Se acerca al león 00:03:03
Y con un mero gesto lo devuelve a su jaula 00:03:04
Por este hecho y por otros similares 00:03:08
Los infantes de Carrión se convierten 00:03:10
En objeto de burla de los hombres del Cid 00:03:12
¡Y ellos tan rojos de indignación! 00:03:14
En realidad, su único mérito 00:03:17
Es haber nacido nobles de alta cuna 00:03:19
¡Nada más! 00:03:21
Mientras que los hombres del Cid y el propio Cid 00:03:22
Se han ganado su fortuna a base de batalla 00:03:24
Un buen día 00:03:28
Los infantes de Carrión le dicen al Cid 00:03:29
Señor, déjenos llevarnos a nuestras esposas 00:03:31
A Carrión para que conozcan sus nuevas posesiones 00:03:34
El Cid no se fía nada de ellos 00:03:37
Pero no le queda más remedio que aceptar 00:03:39
Les deja que se vayan 00:03:40
Pero... 00:03:42
Ordena a un hombre suyo que los siga de cerca 00:03:43
Yendo de camino 00:03:46
Pasan por el Robledo de Corpes 00:03:47
Que es una localidad de Guadalajara 00:03:49
¡Hazte cuenta desde dónde van y hasta dónde! 00:03:51
Y pasando por allí 00:03:53
Los infantes les dicen a sus hombres 00:03:55
Que se alejen un momento 00:03:57
Porque se van a adentrar en el Robledal 00:03:58
Para estar un poco a gusto 00:04:01
Y a solas con sus esposas 00:04:03
Los hombres les dejan solos 00:04:06
Se adentran en el bosque 00:04:07
Y cuando vuelven 00:04:09
Están solo ellos 00:04:11
¿Qué ha pasado con las hijas del Cid? 00:04:14
¿Con Elvira y con Sol? 00:04:16
Los infantes de Carrión con sus hombres se van 00:04:19
Pero recordad que hay un hombre 00:04:22
Que los va siguiendo, un hombre del Cid 00:04:23
Cuando llega allí 00:04:25
Se encuentran Doña Elvira y Doña Sol 00:04:27
Tiradas en el suelo 00:04:29
Ensangrentadas 00:04:30
Medio muertas 00:04:31
Humilladas 00:04:33
En todos los sentidos 00:04:34
Golpeadas y maltratadas 00:04:35
Por los infantes de Carrión 00:04:37
Que las han dejado allí 00:04:39
Abandonadas 00:04:40
Es su venganza 00:04:41
¿Tú te imaginas cómo me pongo yo 00:04:43
Cuando me entero de esto? 00:04:44
¿Tú te lo imaginas? 00:04:45
O sea, con la peña 00:04:47
A la que yo he liquidado 00:04:48
Verás todo lo que le han hecho a mis hijas 00:04:50
Es que te juro, te juro a las madres 00:04:52
Que te lo juro, que es que es lo sensato 00:04:53
Pero yo soy un noble 00:04:56
Y un noble consecuente con su condición 00:04:57
Así que, ¿qué hago? 00:05:00
Tú dirás, pues matarlos, matarlos 00:05:02
Pues no 00:05:03
Lo que hago es lo que tengo que hacer 00:05:04
Como noble que soy 00:05:06
Que es acudir a mi señor 00:05:08
El rey 00:05:11
Del mismo modo que mis vasallos 00:05:12
Acuden a mí en busca de ayuda 00:05:13
Al saber esta noticia 00:05:17
El rey entra en cólera 00:05:18
Tened en cuenta que el casamiento lo propició él 00:05:20
Y decide hacer algo 00:05:23
Que los reyes hacían en contadísimas ocasiones 00:05:25
Que es reunir las cortes 00:05:27
¿Qué son las cortes? 00:05:28
Una institución en la que se juntaban el rey 00:05:29
Con los nobles más importantes 00:05:32
Con los miembros también de la iglesia 00:05:34
Y con representantes de algunas de las ciudades 00:05:36
Es decir, las presidía el rey 00:05:39
Mandaba el rey 00:05:41
Pero actuaban todos estos como consejeros suyos 00:05:42
Por eso no se reunían tan frecuentemente 00:05:46
Y ojo 00:05:48
Nuestro colega el rey 00:05:49
Las convocó 00:05:51
Por el Cid 00:05:52
Fijaos la importancia que tenía ya para él 00:05:53
El rey, por cierto, que es Alfonso VI 00:05:56
Que no lo habíamos dicho 00:05:59
Alfonso VI 00:06:00
Este es un momento muy importante en nuestra historia 00:06:01
El Cid 00:06:04
Tanto tiempo después vuelve a Castilla 00:06:05
Y vuelve triunfante 00:06:07
Envidia y admiración 00:06:09
De todos los que lo ven 00:06:12
¿Qué ocurre en las cortes? 00:06:13
Ante toda la concurrencia 00:06:16
El Cid exige 00:06:18
A los infantes de Carrion 00:06:20
Uy, este se esconde 00:06:21
Anda, vete para acá que ahora te vas a ayudar 00:06:23
El Cid les exige que devuelvan 00:06:25
Las espadas tan valiosas que él les dio 00:06:27
La colada y la tizona 00:06:29
Y además 00:06:31
Las riquezas 00:06:31
Que les se ha otorgado 00:06:33
Como gote de sus hijas 00:06:34
Los infantes dicen 00:06:36
Bueno, mientras no sea eso 00:06:37
Pues vale 00:06:38
Nos duele, pero... 00:06:39
Y después 00:06:40
Llega la parte de recuperar el honor 00:06:41
Y entonces es cuando el Cid 00:06:43
Los reta a duelo 00:06:45
Y tú dirás 00:06:47
¡Oh! 00:06:48
¿Se los carga? 00:06:48
Pues no 00:06:49
Pues no 00:06:50
Porque 00:06:51
Aparecen dos hombres del Cid 00:06:52
De su máxima confianza 00:06:54
Y le piden a su señor 00:06:56
Que les dejen batirse por él 00:06:58
Porque no se van a echar las manos 00:07:00
Con estos dos 00:07:01
Hijales impresentables 00:07:03
Y así es 00:07:05
Dos hombres del Cid 00:07:06
Retan a los infantes de Carrión 00:07:07
Y los humillan públicamente 00:07:09
En ese momento 00:07:11
El Cid ha recuperado su honor 00:07:12
Que había perdido 00:07:15
Por culpa de la humillación 00:07:16
A la que habían sometido 00:07:18
Los infantes de Carrión a sus hijas 00:07:19
El rey está contento 00:07:21
Y satisfecho 00:07:23
¡Oh! 00:07:24
¡Tanto que ya enojo! 00:07:24
Como se siente responsable 00:07:26
De este casamiento tan desafortunado 00:07:28
Decide ofrecer al Cid 00:07:30
Una nueva moda para sus hijas 00:07:32
Esta vez 00:07:34
Con los infantes de Navarra y Aragón 00:07:35
¡Lo más selecto! 00:07:37
El Cid 00:07:39
Sabe que sí 00:07:40
Ahora sí 00:07:41
Este sí es 00:07:42
Un auténtico casamiento 00:07:43
Digno 00:07:45
Para él 00:07:46
Y para sus hijas 00:07:46
Y de esta manera 00:07:48
Con esta culminación máxima 00:07:49
De la honra del Cid 00:07:51
Acaba el cantado 00:07:53
¡Woohoo! 00:07:54
¡Nosotras estamos muy contentas! 00:07:55
Subido por:
Raul G.
Licencia:
Reconocimiento - No comercial - Compartir igual
Visualizaciones:
12
Fecha:
20 de julio de 2023 - 14:30
Visibilidad:
Público
Centro:
ISMIE
Duración:
07′ 58″
Relación de aspecto:
1.78:1
Resolución:
1280x720 píxeles
Tamaño:
234.67 MBytes

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