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Lengua II Clase a distancia 24 - Modernismo y 98 (II): Rubén Darío - Contenido educativo
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Rubén Darío
Hola, esto es una clase de lengua nivel 2 que había que continuar ya que el otro día no pude terminar el tema del modernismo en una sola clase y nos quedamos aquí en Rubén Darío.
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Antes de seguir voy a aprovechar a mostraros, para quien le guste, aquí a Amiga, a mi gata que está aquí atendiendo atentamente a todo menos la clase.
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Bueno, aquí la tenéis y nada, voy a ver si consigo que no se mueva durante la clase porque está muy cariñosa. Bueno, va a ser que no, ya se está aquí revolviendo.
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Bueno, vamos a lo que vamos, que es a Rubén Darío, que es el poeta modernista por antonomasia de la literatura en español, tanto española como hispanoamericana.
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No es español, es de Nicaragua, pero hay que remarcar que estuvo en España y conoció a varios poetas españoles y escritores, ¿no? Por lo tanto, tuvo una estrecha relación con nosotros.
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Esto ya lo puedo quitar.
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Así que, bueno, pues vamos a Rubén Darío.
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Nació en Nicaragua, en esta época, como tenéis aquí en pantalla, en 1867 y murió en 1916.
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Entonces, en su, digamos, edad adulta, estaba en pleno momento de final de siglo,
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de los movimientos franceses que habíamos hablado, de parnasianismo y simbolismo, esto que habíamos dicho, es el momento propicio en el que se impregna,
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llega la influencia a Hispanoamérica de estos movimientos franceses. Por lo tanto, Rubén Darío va a ser un escritor que va a escribir en español
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lo que ya se estaba haciendo en Francia y estaba empezando en otros países de Europa. Es curioso, creo que ya lo dije el otro día,
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que llegue a Hispanoamérica antes estos nuevos movimientos que a España, y es normal, digamos, en Hispanoamérica pues había mucho comercio, se viajaba mucho y también es normal que en esos momentos pues se dieran antes algunos movimientos que aquí.
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Bueno, como tenéis aquí, viajó por toda América y Europa propagando las nuevas tendencias poéticas, de las que será el impulsor y principal representante.
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Fruto de estos viajes tenemos este detalle de que murió en París. Es la prueba de todo lo que viajaba y de la tendencia que tenía a conocer bien Francia.
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Y muy importante que en España se relacionó con otros autores modernistas como Juan Ramón Jiménez o Bayín Clan. Y tiene tres libros importantísimos que los tenemos que conocer. Esto suele ser una pregunta de examen, Rubén Darío y su obra, sus etapas, etc.
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Entonces, una cosa que quería enseñaros del otro libro que tenéis, el de Marea Verde, es que agrupa sus etapas en dos épocas. La etapa escapista, de escape, de evasión, y luego la etapa intimista.
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Entonces, los dos primeros libros, Azul y Prosas profanas, pertenecen a la etapa escapista. Y luego el tercero, Cantos de vida y esperanza, será de la etapa intimista.
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Vale, entonces, el primer libro es azul, y es un conjunto de poemas y cuentos, es decir, es un libro que mezcla verso y prosa, ¿vale? Tiene versos, o sea, tiene poemas y tiene cuentos, prosa y verso.
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Vamos a verlo aquí con más detalle
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Incluye cuentos breves y otros pocos poemas
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Y es un libro que recrea un mundo exótico de hadas, princesas, centauros
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Y escenas galantes con un lenguaje aristocrático
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Y con también uso de elementos simbolistas
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Entonces, acordaos del parnasianismo y el simbolismo, una vez más
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Vuelvo atrás
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el parnasianismo
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es una obra de tendencia formalista
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partidaria del arte por el arte
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no tiene compromiso social
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no busca cambiar la sociedad
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ni criticar nada de sociedad y política
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y es por naturaleza
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un movimiento de evasión
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porque aquí dice que no lo subraya un amarillo
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pero se sienten fascinados por las culturas antiguas
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y los ambientes exóticos
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entonces es exactamente
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lo que tiene el libro azul, ¿vale? Incluye cuentos breves y unos pocos poemas y el mundo
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exótico de hadas, princesas, centauros, escenas galantes, con lenguaje aristocrático.
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¿Vale? Entonces, va a seguir en la misma línea en prosas profanas. Prosas profanas
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es un libro que recoge todos los rasgos formales y temáticos que hemos analizado, ¿no? Preocupación
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por la forma, es como el parnasianismo, que es un movimiento muy formalista, están empeñados
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en lo que llaman la obra bien hecha, es decir, buscar perfecto ritmo, musicalidad, muy buenas
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rimas, una buena colocación de las palabras, por así decir, está todo muy medido, muy
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estudiado, ¿vale? Tiene, pues como dice aquí, musicalidad, eso les importa muchísimo, renovación
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métrica, claro, van a usar nuevas medidas de versos que no se han estado usando para
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hacer algo original, cosmopolitismo, escapismo, pero ya se ven prosas profanas respecto a
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Azul, una pequeña evolución que se manifiesta en una preocupación social y filosófica,
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Ya tiene ahí un poco de preocupación social y filosófica. Aquí se plantea que es el arte, el amor, el placer, la religión y la creación poética. De la creación poética vamos a tener bastantes poemas.
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Es algo que él lo conecta, digamos, con el mismo sentido de la vida.
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La poesía, la creación poética es algo que para él es algo que implica la trascendencia y todas las preocupaciones existenciales.
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También aparecen algunos poemas dedicados a temas españoles.
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Le gustaba España y tenía ya algunos poemas dedicados a temas españoles. Pero sobre todo, prosas profanas, que no lo dice aquí bien claro. El libro está en verso y se llama prosas, y es que no tiene nada que ver.
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Es que las prosas es un término religioso. Una prosa es como un sermón o algo así. Entonces, este adjetivo que le pone profanas, pues es algo así un poco escandaloso, algo un poco más, como decir, esto provocador casi, ¿no?
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¿no? Entonces, prosas profanas quiere decir, pues, algo que parece religioso y que está profanado, ¿no? Y es que va a ser un libro que va a tener una buena dosis de erotismo, ¿de acuerdo? Entonces, aquí en todas estas cosas, musicalidad, renovación métrica, cosmopolitismo, escapismo, también hay que hablar bastante de erotismo en prosas profanas. Luego veremos un poema donde vamos a ver algo de esto.
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y entonces claro, eso también lo va a ver como algo que tiene que ver con el disfrute, con el placer
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aquí no se habla del placer, pero claro, el amor y el placer pues tienen una gran dosis de erotismo
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y bueno, luego por último, su tercera obra sería Cantos de Vida y Esperanza
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que es esto que nos dice etapa intimista
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dice que en ella aparecen problemas que afectan al ser humano
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como la pérdida de juventud y la angustia ante la muerte, o sea, temas generales, humanos, de tono bastante melancólico, ¿vale?
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Entonces dice que es una poesía más profunda, teñida de melancolía y amargura, es un libro de tono más grave,
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y ya tiene una cierta dosis de preocupación social, como esto, ¿no?
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Se preocupa por los problemas del mundo hispánico frente al imperialismo de los Estados Unidos.
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Él se alinea claramente con el hispanismo, frente a la anglosfera, por así decir, el tema del imperialismo anglosajón.
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Y contra esto propone una unión de los pueblos americanos, que tiene que haber un entendimiento y un compromiso, alianza, etc. que tiene que ver con el hispanismo frente a Estados Unidos.
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y también por los problemas existenciales del ser humano
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que estamos diciendo con un tono de cansancio y amargura
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aquí en este libro, claro, después de todo este canto al erotismo
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al disfrute y todo que hay en Azul y prosas profanas
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en Cantos de Vida y Esperanza
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pues ya se ve a las puertas de la vejez
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y va a ser un poeta distinto
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que va a tener una gran dosis de melancolía
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Tenemos aquí un poema de prosas profanas, de la primera etapa, de la etapa escapista
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Y vais a ver claramente el tono lúdico, el tono exótico, el tono aristocrático
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Todo este conjunto de elementos que tiene que ver con escaparse de la realidad
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y hacer ahí una apología, un canto, una defensa, una especie de alabanza, de disfrute de todos los lujos, del erotismo, de todas las cosas aparentemente banales,
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aparentemente superfluas, superficiales, porque es bonito y porque le gusta y porque además lo dice muy bien y con mucho ritmo y mucha rima.
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Una cosa muy importante, antes de seguir con este libro, es esto que dice aquí.
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El malestar de Rubén Darío está presente en el prólogo de las prosas profanas.
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Aquí tenemos este cuadrito rosa.
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Dice, fíjate en esta cita, esta es la frase más famosa de Rubén Darío, del prólogo,
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donde se ve su teoría literaria, su intención literaria.
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He aquí que veréis en mis versos princesas, reyes, cosas imperiales, visiones de países lejanos o imposibles. ¿Qué queréis? Yo detesto la vida y el tiempo en que me tocó nacer. ¿Vale? O sea, que es eso, que todo esto él lo reconoce.
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Y si alguien se lo reprocha, lo justifica diciendo es que detesto la vida y el tiempo en que me tocó nacer. Una época de apogeo industrial, de carbón, de petróleo, de que empiezan ya movimientos obreros, luchas por las injusticias, superpoblación, contaminación, enfermedades, ¿no?
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Entonces, bueno, guerras, por supuesto, ¿no? Y por eso dice que veréis en mis versos princesas, reyes, cosas imperiales, visiones de países lejanos, ¿qué queréis? Yo detesto la vida y el tiempo en que me tocó nacer, ¿vale? Pues esto lo vemos aquí. En este poema, Sonatina, que es famosísimo, es mucho más largo, aquí lo tenemos resumido, lo veis con puntos suspensivos, pero tenemos unas estrofas aquí muy bonitas, ¿vale? Y dice así.
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La princesa está triste. ¿Qué tendrá la princesa? Los suspiros se escapan de su boca de fresa. ¿Qué
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ha perdido la risa? ¿Qué ha perdido el color? La princesa está pálida en su silla de oro. Está
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mudo el teclado de su clave sonoro y en un vaso olvidada se desmaya una flor. El jardín puebla
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el triunfo de los pavos reales. Parlan china, la dueña dice cosas banales y vestido de rojo
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piruetea el bufón. La princesa no ríe, la princesa no siente, la princesa persigue por el cielo de
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oriente la libélula vaga de una vaga ilusión. ¡Ay, la pobre princesa de la boca de fresa! Quiere
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ser golondrina, quiere ser mariposa, tener alas ligeras bajo el cielo volar, ir al sol por la
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escala luminosa de un rayo, saludar a los lirios con los versos de mayo o perderse en el viento
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sobre el trueno del mar, ¿vale? Pues fijaos qué tono, ¿no? Es una belleza, pero claro, es algo que parece casi infantil,
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de hecho este poema pues se lo aprenden los niños, ¿no? Se les manda a veces a aprenderse algunos versos o algo así,
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las niñas, a las niñas les encanta, ¿no? La princesa, la princesita, la princesa, con todos sus lujos y todos sus...
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Y fijaos que es que está triste, ¿no? Está triste y lo dice de una manera que casi parece una ridiculez de por la tontería, ¿no? De la princesa está triste, ¿no?
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Esto me recuerda a una obra de teatro, ¿no? Que también veremos en su momento, que es Tres sombreros de copa, donde hay uno que se va a casar con una chica, una mujer rica, una chica joven rica, pero pija, tonta, ¿no?
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Y claro, el padre de ella pues ve que está triste y hablando por teléfono dice, ah, está llorando en el sofá malva de la sala rosa, el sofá malva de la sala rosa, entonces vemos ahí a la chica.
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Bueno, pues todo esto, claro, es un tópico, ¿no? Una especie de cuadro ya como que nos podemos imaginar, de totalmente cursi. Esto es una cursilada, una cursilada, pero que es muy bonita y que era precisamente lo que quería Rubén Darío y, de hecho, tuvo su público.
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Claro, esto pues llegó a gustar porque era una cosa original y era una especie casi de reírse de los problemas del mundo poniendo atención a estas banalidades que son solamente lo que decía el parnasianismo, el arte por el arte.
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Es decir, un arte que no tiene un fin más allá de complacer, de dar placer, de mostrar belleza, de producir un estímulo de los sentidos.
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Ahora veremos que muchas veces se tocan varios sentidos a la vez y cosas de esas para dar una percepción sensorial múltiple.
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Entonces, es precisamente lo que se quiere hacer, una poesía de evasión.
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Entonces aquí hay otra cosa importante que es contar las sílabas, que tenemos que ver la renovación métrica aquí. Entonces hay una cosa que tenéis que ver inmediatamente en los poemas de Rubén Darío.
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Venga, la de rosa. Estamos aquí cursis, pues vamos a poner color rosa. La princesa... bueno, perdón, la princesa es... aquí tendríamos una sinaleza. Voy a deshacer un momentito o borrar.
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A ver, la princesa está triste, ¿no? ¿Cuántos van aquí? Pues va 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7.
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Que tendrá la princesa
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Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete
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Bueno, y ¿por qué no estaba contando ocho, nueve, diez?
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Pues porque aquí hay una cosa muy importante
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Los versos preferidos del modernismo son los alejandrinos
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Son versos de catorce sílabas
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Pero acordaos, si no lo he dicho, lo digo ahora
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que los versos largos, por así decir, de 12, 14, 16 sílabas, que son así, que son en número de sílaba par, como 14 o 16, los buenos poetas los dividen en dos versos de 7 unidos, por así decir.
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Entonces, cada mitad de cada verso se llama hemistiquio, ¿vale? Esto sería un hemistiquio y esto es otro hemistiquio. Voy a enseñaros aquí cómo se escribe, ¿vale? Y para que veáis lo que es, ¿no?
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Un hemistiquio es cada una de las dos partes de un verso de arte mayor separadas por una cesura o pausa interna, ¿de acuerdo? Entonces, fijaos aquí, a ver, ¿dónde estaba esto? Que aquí hay unos puntos suspensivos, la princesa está triste, ¿qué tendrá la princesa?
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Y lo importante, bueno, aquí queda claramente marcada la pequeña pausa que se llama cesura, ¿de acuerdo? O sea, hemistiquio y entre los dos hay una pequeña pausa que se llama cesura, pero otras veces es muy sutil esa pausa.
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Lo importante es que a las siete sílabas y de la séptima a la octava sílaba no haya una palabra que haya que cortar en dos, ¿vale? Esto no se puede hacer, ¿vale? Cojo la goma de borrar porque aquí lo que tendremos es los suspiros escapan y aquí tendríamos la cesura, ¿vale? De su boca de fresa.
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Si los contáis, serán siete y siete.
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¿Qué ha perdido la risa?
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¿Qué ha perdido el color?
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¿Vale?
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Entonces, son todos de catorce, pero que si os fijáis están formados en siete más siete.
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¿Vale?
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Y nos puede pasar incluso una cosa, que es que, por ejemplo, mira, lo tenemos aquí.
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Que un verso, un hemistiquio, ¿no?
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La primera mitad de un verso
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Hay que contarlo como si fuera un verso independiente
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Entonces, ¿qué pasaba con las esdrújulas?
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¿Vale? Tenemos aquí pálida
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Pues que se restaba una sílaba
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Si os fijáis, la princesa está pálida
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¿Cuántas hay?
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Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho
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Pero no puede ser ocho, tiene que ser siete, porque estamos con versos alejandrinos, ¿no? Entonces, ¿qué pasa? Que este pálida hace que se reste una sílaba, ¿de acuerdo? Entonces, este sería siete, y en su silla de oro pues será otra siete, ¿de acuerdo?
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Entonces, eso es muy importante, que tenemos los versos divididos en 7 y 7 como si fueran versos independientes.
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Más cosas, vamos a ver la rima.
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Bueno, pues estamos, que tenemos aquí princesa, fresa, ¿no?
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Entonces esto será 14A, 14A, ¿vale?
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Y luego tenemos color, que va a rimar con flor.
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Entonces esto será B, 14B, ¿vale? Y luego oro con sonoro, C, C, ¿vale? Y aquí, ¿qué pasa? Pues que empieza otra vez y esto es otro verso, o sea, otra estrofa.
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Esto que veis aquí, cada una es una estrofa, se llama sexteto, porque son seis versos.
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Es un conjunto de seis versos, un cuarteto, hay terceto, cuarteto, quinteto, sexteto.
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Pues son sextetos. También es una renovación métrica bastante novedosa, porque el sexteto no se usaba mucho.
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Y el verso alejandrino, el de catorce sílabas, no se usaba desde la Edad Media, desde el Mester de Clerecía,
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Gonzalo de Berceo, el arquitecto de Ita
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o sea que esto es muy original en este momento
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hacer esta renovación métrica
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versos alejandrinos
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y además con distintas secuencias de versos
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que en este caso son de seis
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ya veremos que Rubén Darío también hace el soneto modernista
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que son sonetos, que son dos cuartetos y tres retos
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pero que los hace con alejandrinos
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o a veces incluso mezcla alejandrinos con el de casílabos
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y con heptasílabos, que es lo que también vamos a ver a continuación.
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Bueno, entonces voy a quitar la métrica.
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Aquí vemos, bueno, reales, banales, ¿no?
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Sería de nuevo, si siguiéramos aquí en este orden, pues tendríamos que decir,
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hemos dicho, ya llevamos a BC, ¿no?
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Pues tendríamos que decir DD, E, FFE, ¿no?
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Y luego seguir con GH, etc.
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Pero realmente bastaría con analizar el primero y decir que los demás son iguales,
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pero con distintas terminaciones, ¿no?
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Reales, banales.
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Bufón va a rimar con ilusión, siente oriente, ¿no?
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Y aquí, rosa, mariposa, ¿no?
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Volar va a rimar con mar y rayo, mayo, ¿no?
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Pues así.
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Vale, pues vamos a quitar esto.
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Ay, va, esto no es.
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¿Dónde está?
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La voy a borrar.
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Aquí.
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Vale.
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Entonces, vamos a coger otro color, esto mismo.
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¿Qué tenemos aquí? Pues tenemos también una figura retórica, y ya os cuento algunas para que sepáis contarlas, ¿no?
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¿Os habéis fijado que este verso empieza y acaba igual, con las mismas palabras?
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Pues esto es una figura retórica que se llama, y no es ningún sarpullido ni enfermedad, epanadiplosis.
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¿Vale? La epanadiplosis es la figura retórica de construcción que consiste en terminar un verso con una frase con la misma palabra con la que se empieza.
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En este caso es un síntoma nominal, pero bueno, la princesa, la princesa, ¿no?
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Crece su furia y la tormenta crece, ¿vale?
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Pues empezar y acabar un verso igual, esto se llama epanadiplosis.
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¿De acuerdo? Entonces tenemos aquí una epanadiplosis.
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Los suspiros se escapan de su boca de fresa, ¿no? Entonces, ¿qué tenemos aquí? Una metáfora de genitivo. Esto es una metáfora donde el término, bueno, o sea, estamos hablando de la boca, ¿no?
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Que es un término real, y fresa que es imaginario, ¿no?
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Entonces, esto de cabellos de oro, boca de fresa, es un tipo de metáfora que no es una metáfora pura, ¿no?
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Pero sería metáfora, ¿vale? Boca de fresa.
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Y aquí además tenemos una pequeña dosis de erotismo, porque estamos viendo una boca muy apetecible, ¿vale?
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Que sería ya un rasgo, otro rasgo del modernismo.
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¿Qué ha perdido la risa? ¿Qué ha perdido el color?
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¿no? Aquí tenemos una bimembración, pero que esto es concretamente un paralelismo,
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paralelismo y anáfora también, porque tenemos el mismo comienzo, ¿no? Bueno, que ha perdido,
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que ha perdido, ¿no? Y luego tenemos este cambio de la risa, el color, o sea que tenemos
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paralelismo y anáfora, ¿vale? Acordaos de todas las figuras retóricas, ¿vale? Tenemos
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Pues paralelismo, paralelismo, pues bueno, pues hay miles, ¿no? A ver, vale, estas mierdas, a ver, errado lleva al camino, errada lleva a la guía, ¿no?
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que los gritos de angustia del hombre
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los ahogan con cuentos, que el llanto del hombre
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que empiezan con que los gritos
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que el llanto de él, ¿vale?
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todas estas cosas
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pues son
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paralelismo y anáfora
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pues porque empieza igual
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¿vale? entonces, a ver, vuelvo aquí a donde estaba
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paralelismo y anáfora
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la princesa está pálida en su silla de oro
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está
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mudo el teclado
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de su clave sonoro
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el clave pues ya sabemos que es un piano
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de estos bastante lujoso
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que además produce un sonido
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más especial, que engancha las cuerdas en vez de golpearlas
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y en un vaso olvidada se desmaya
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una flor, tenemos aquí
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una
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bueno, un escenario aquí
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para que veamos
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que
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con estas personificaciones
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Esta sería una personificación, esto sería otra personificación. Vemos este ambiente triste donde la princesa está pálida, otra personificación. Estas personificaciones aumentan esa tristeza de la princesa que se expande en su decorado.
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Todo esto es totalmente teatral, totalmente literario. El jardín puebla el triunfo de los pavos reales. Aquí creo que se habrá saltado alguna estrofa. Vemos objetos lujosos, en este caso animales, pavos reales. Es algo de la ostentación, de la exhibición de colorido.
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en parlanchina la dueña dice cosas banales
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la dueña es una criada mayor, una señora mayor
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una dueña, pues es una viuda normalmente
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y será pues eso, una de las criadas de la princesa
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y vestido de rojo piruetea el bufón
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o sea que tenemos además hasta un bufón
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de esto que es propio de los reyes, príncipes y todo eso
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para hacerlos reír
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pero tenemos aquí otro paralelismo sintáctico
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otro paralelismo llanáfora
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con la princesa no ríe, la princesa no siente
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Tenemos paralelismo y anáfora, más anáfora del mismo comienzo, con la princesa, la princesa, la princesa, la princesa persigue por el cielo de oriente la libélula vaga de una vaga ilusión.
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Aquí, aparte, o sea, tenemos varias cosas.
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la aliteración
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aliteración
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es
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la figura retórica
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que consiste en la repetición de uno o varios sonidos
00:28:19
dentro de una palabra o frase
00:28:21
aquí tenemos además un ejemplo de Rubén Darío
00:28:22
con el ala leve del leve
00:28:25
abanico
00:28:27
este verso es
00:28:27
muy famoso, con el ala leve del leve
00:28:31
abanico, además parece que está abanicando
00:28:33
esto
00:28:35
de estimular los sentidos
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de producir múltiples sensaciones sensoriales, ¿no? Es un rasgo muy propio del modernismo. No quieren hacer pensar tanto con la poesía, sino transmitir sensaciones, ¿vale?
00:28:39
Muchas veces vamos a ver colores, olores, o sea, aromas, vamos a tener sonidos, vamos a tener sensaciones táctiles, ¿no? Todo ello de estimular los sentidos es algo muy propio del modernismo, ¿vale?
00:28:53
Y no solamente tenemos esta aliteración, sino que fijaos que en esta construcción donde tenemos esta inversión del adjetivo, ¿no?
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Libélula vaga y vaga ilusión, ¿vale?
00:29:19
Esta inversión de términos, esto se llama quiasmo.
00:29:23
Un quiasmo es la figura retórica que cruza términos.
00:29:27
O sea, es como un paralelismo, solo que con términos cruzados.
00:29:33
Figura teórica de construcción que consiste en la repetición o inversión del orden de palabras.
00:29:40
Aquí tenemos de Góngora, cuando pitos flautas, cuando flautas pitos.
00:29:45
Pues tenemos una inversión de términos, pitos flautas, flautas pitos, por ejemplo.
00:29:50
Es un quiasmo sencillo.
00:29:54
Y aquí tenemos la vaga y vaga ilusión.
00:29:57
Pues está el adjetivo después y luego el adjetivo antes, sustantivo-adjetivo, adjetivo-sustantivo.
00:30:02
En esto siempre me acuerdo de un profesor mío que decía, yo tengo un par de amigos, un matrimonio, ¿no?, que los llamo el quiasmo, porque se llaman José María y María José, ¿no?
00:30:08
Entonces, eso sería un quiasmo también, ¿vale?
00:30:18
Bueno, y luego, por último, en esta estrofa, hay la pobre princesa de la boca de rosa.
00:30:21
Entonces, tenemos otra metáfora de genitivo, como la de antes, en vez de boca de fresa, boca de rosa.
00:30:25
también es algo apetecible
00:30:30
además la rosa es un símbolo amoroso
00:30:33
como siempre, eso que siempre ha dicho
00:30:37
en tanto que de rosa y azucena se muestra el color en vuestro gesto
00:30:39
que decía Rubén Darío
00:30:44
volvemos a tener el paralelismo y anáfora
00:30:45
aquí quiere ser golondrina, quiere ser mariposa
00:30:49
tener alas ligeras
00:30:52
bajo el cielo volar
00:30:55
Aquí casi hay una estructura quiasmática también, un poquito de quiasmo, porque tenemos el verbo delante y luego el verbo después.
00:30:57
Pero bueno, pues nada, aquí simplemente podríamos explicar que quiere algo imposible y está triste porque no encuentra todo lo que quiere, a pesar de que lo tiene todo, porque es una princesa, no sé qué.
00:31:05
ir al sol por la escala luminosa de un rayo
00:31:20
bueno, escala luminosa de un rayo
00:31:24
pues también podríamos hablar
00:31:26
de un tipo de metáfora
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que un rayo de sol puede ser una escalera
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de luz
00:31:32
saludar a los lirios con los versos de mayo
00:31:32
o perderse en el viento
00:31:35
sobre el trono del mar
00:31:37
todo tipo de deseos
00:31:39
de esta princesa
00:31:41
entonces vemos todo este tiempo
00:31:43
todos estos rasgos del modernismo
00:31:45
el escapismo, evasión
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elementos aristocráticos para escapar de la realidad, elementos que no son propios de la realidad en general.
00:31:48
Y luego aquí hay una cosa más que es que también podríamos decir que hay una interpretación que tiene bastante sentido
00:32:00
que puede ser todo ello una especie de metáfora de la propia inspiración o creación poética.
00:32:11
¿No? Podríamos decir que la princesa es la inspiración poética del poeta, de Rubén Darío. Entonces, la princesa está triste, ¿qué tendrá? ¿Y qué pasa? Pues que le pasa algo, que no sale a lo mejor el poema perfecto, o que busca siempre decir algo más que no sale, ¿no? Eso es algo propio de la poesía.
00:32:18
Cuando uno escribe poesía siempre va a tener grandes frustraciones porque no consigue decir lo que quiere decir o no sabe qué decir o le pasa algo, ¿no? Entonces esto de la princesa está triste tiene sentido como metáfora de la propia creación poética.
00:32:41
Además es algo bello, es algo, bueno, que está rodeado ahí de belleza, ¿no?
00:32:56
Así que nada, creo que he respondido a las preguntas de aquí, ¿vale?
00:33:06
Y nada, seguimos.
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Tenemos este otro poema que es Melancolía.
00:33:12
Melancolía es un poema de prosas profanas, de...
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Voy a hacerlo más pequeño que se ve borroso, ¿no?
00:33:20
Perdón, de prosas profanas no, de cantos de vida y esperanza.
00:33:23
Del último libro que es ya el que tiene preocupaciones existenciales, un tono melancólico que abarca o quiere hablar de temas más profundos. Tiene una preocupación existencial, el tono melancólico y vamos a leerlo.
00:33:26
vamos a leerlo, dice así
00:33:47
hermano, tú que tienes la luz, dime la mía
00:33:50
soy como un ciego, voy sin rumbo y ando a tientas
00:33:54
voy bajo tempestades y tormentas, ciego de ensueño y loco de armonía
00:33:58
ese es mi mal, soñar
00:34:03
la poesía es la camisa férrea de mil puntas cruentas que llevo sobre el alma
00:34:05
las espinas sangrientas dejan caer las gotas de mi melancolía
00:34:10
Y así voy, ciego y loco, por este mundo amargo. A veces me parece que el camino es muy largo y a veces que es muy corto. Y en este titubeo de aliento y agonía, cargo lleno de penas lo que apenas soporto. ¿No oyes caer las gotas de mi melancolía?
00:34:14
Pues aquí tenemos un poema de un tono muy, muy, muy, muy distinto
00:34:31
Aquí la princesa está triste de su boca de fresa y todo eso
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Eso ha quedado muy lejos, ¿verdad?
00:34:41
Esto es un poema, además en primera persona
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De una clara implicación existencial, melancólica
00:34:48
bueno, pues
00:34:54
vamos a hacer primero
00:34:56
la forma, el análisis formal
00:35:01
para ver
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un poco
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de qué tipo de renovación
00:35:07
métrica hay aquí
00:35:09
entonces, hermano, tú que tienes la luz, dime la mía
00:35:10
vale
00:35:13
aquí tenemos
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exactamente lo de antes
00:35:20
en un verso, vamos a usar
00:35:21
otro color, ahora el verde
00:35:23
por ejemplo
00:35:26
para hacer las sílabas.
00:35:26
Hermano, tú que tienes.
00:35:34
Entonces, ¿aquí qué tenemos?
00:35:39
Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete.
00:35:40
Entonces, tú que tienes, aquí tendríamos el hemistiquio.
00:35:43
Y luego tendríamos la luz, dime la mía.
00:35:48
Entonces tendríamos aquí 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
00:35:53
Entonces este sería otro verso alejandrino
00:35:58
Sin embargo, ya viendo el poema por encima
00:36:01
Vemos que tenemos versos largos y cortos
00:36:03
Entonces este es un poema polimétrico
00:36:05
No es isosilábico, sino anisosilábico
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Es decir, de distinto número de sílabas
00:36:13
Mejor decir, polimétrico
00:36:16
Que también es una gran novedad
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ya lo hacía Becker
00:36:23
pero en el romanticismo
00:36:26
pero aquí se va a avanzar un poco más
00:36:27
sobre todo por la inclusión de Alejandrinos
00:36:30
aquí fijaos que
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que curioso esto
00:36:36
soy
00:36:38
como un
00:36:39
ciego, ¿cuántos van aquí?
00:36:41
1, 2, 3
00:36:44
4, 5
00:36:45
y aquí tenemos
00:36:47
Boy, y aquí en Boy
00:36:50
hay que partirlo, aunque tengamos seis sílabas, porque voy es un monosílabo que suma una, ¿vale?
00:36:51
Soy como un ciego, voy sin rumbo y ando a tientas, ¿no? Entonces de aquí tendríamos siete. Sin rumbo y ando a tientas, ¿vale?
00:36:59
Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete. Efectivamente, tenemos catorce sílabas, teniendo en cuenta que aquí
00:37:12
tenemos un hemistiquio que acaba con un monosílabo voy que va a sumar una sílaba, ¿vale? Entonces
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tenemos seis más una, siete, y luego siete. Y aquí hay una cosa que me preguntáis mucho
00:37:25
en clase, ¿por qué no hace sinaleza con ando, no? Y es que acordaos que cuando tenemos
00:37:30
una vocal como y, ¿no? La y es una semivocal, es una vocal que hace dictongos, y luego tenemos
00:37:36
una sílaba tónica, ¿vale? Ando, ¿no? Aquí no hay sinalefa y no puede haberlo nunca.
00:37:46
No se dice mi alma, sino mi alma, ¿no? Entonces rumbo y ando, ¿vale? Entonces tened muy en
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cuenta que cuando tengamos una i y luego una palabra que empieza por vocal tónica, no
00:38:01
podemos hacer una sinarefa, ¿no? Pues, por ejemplo, pues eso, lo de mi alma, ¿no? Por
00:38:09
ejemplo, y ando. Entonces aquí tenemos que separarlas. Bueno, y aquí la métrica nos
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va a ir cambiando. Voy bajo tema. Vale, efectivamente, aquí tenemos dos endecasílabos. Si los contáis,
00:38:23
son de once y once, ¿vale? Además, endecasílabos bien hechos, porque los endecasílabos bien
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hechos son aquellos que tienen acento en la sexta. Voy bajo tempestad, ¿vale? Esto será
00:38:40
la sexta sílaba. Voy bajo tempestades y tormentas, ¿no? La sexta sílaba tiene que tener un
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golpe de voz en los decasílabos. Ciego de ensueño y loco de armonía. Ciego de ensueño
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y loco de armonía, ¿no? Aquí tendríamos la tónica en la sexta sílaba, ¿vale? Esto
00:39:00
Muchas veces esto es una prueba de que es un endecasílabo, porque a lo mejor estáis contando mal, y a lo mejor salen doce o diez o algo así, pero si notáis que hay acento en la sexta, contad bien porque probablemente sea un endecasílabo.
00:39:08
¿Vale? Ese es mi... Vale, entonces vamos a tener aquí bastantes endecasílabos. El endecasílabo es un verso de larguísima tradición literaria y por lo tanto va a estar muy presente siempre.
00:39:23
Vale, aquí tendríamos 14 con una licencia métrica. No me quiero demorar mucho en contarlas, pero aquí habría que ponerle una diéresis, ¿no? Como hacían José de Espronceda o algún otro poeta que ya lo marcaba, para indicar que aquí tenemos que separar la sílaba, ¿vale?
00:39:39
Porque hay que decir de mil puntas cruentas para que salga catorce, que llevo sobre el alma. Las espinas sangrientas, este será catorce también seguro, además tenemos aquí la cesura, ¿no? Aquí en férrea, además tenemos esta esdrújula que hace que nos reste una, por lo tanto va a ser siete y siete, ¿vale?
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Dejan caer las gotas de mi mano
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Vale, este es un
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Alejandrino también
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Normal, con su
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Hemistiquio normal
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¿Vale? Y así voy
00:40:40
Ciego y loco por este mundo amargo
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Vale, está claro
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Que además ha puesto la coma para hacer
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La cesura, la pausa en medio
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7 más 7
00:40:54
Y a veces me parece
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Que el camino es muy largo
00:41:03
tenemos que son 14
00:41:06
y aquí fijaos que el verso más corto del verso
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además está haciendo este juego
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con que el camino es muy corto
00:41:16
y es el verso más corto también
00:41:17
es un verso de 7 sílabas
00:41:18
es como si hubiera hecho un hemisticio solo
00:41:21
es como si tuviera que seguir aquí
00:41:24
pero nada más que dejar 7 sílabas
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vamos a seguir teniendo 14
00:41:28
en este titubeo
00:41:33
de aliento y agonía
00:41:36
cargo lleno de penas
00:41:38
lo que apenas soporto
00:41:41
no oyes caer las gotas
00:41:43
no, aquí ha hecho una sinaleja tremenda
00:41:45
no oyes caer las gotas
00:41:52
de mi melancolía
00:41:54
sería 14
00:41:55
vale, entonces aquí hay una cosa también curiosa
00:41:57
que si nos fijamos
00:42:00
lo vamos a ver, que tenemos
00:42:01
por la rima
00:42:03
tenemos primero 4 versos
00:42:06
donde tenemos mía
00:42:08
rima con armonía
00:42:09
y tientas rima con tormentas
00:42:11
entonces vamos a tener aquí 14A
00:42:14
B
00:42:16
B
00:42:17
A
00:42:19
entonces vamos a sospechar que esto va a seguir la estructura
00:42:20
de un soneto
00:42:24
vamos a tener poesía y melancolía
00:42:24
pues seguimos igual, y cruentas, tientas
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sangrientas, tormentas
00:42:30
tenemos que el esquema métrico aquí es
00:42:31
11A, o sea, tenemos aquí
00:42:34
14B
00:42:36
14B
00:42:36
A doce A. Entonces tenemos como si fueran dos cuartetos, ¿vale? Pero con distinta métrica, en vez de ser todos en decasílabos, son mezcla de alejandrinos y en decasílabos.
00:42:38
Y luego aquí vamos a tener dos tercetos, un terceto y otro terceto, y esto está haciendo una variación del soneto, que son dos cuartetos y dos tercetos, un soneto de 14 versos, 14 versos nos dicen que es soneto, acordaos de este famoso soneto de Lope,
00:42:54
De un soneto me manda ciervo y grande
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14 versos dicen que soneto
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Pues un soneto
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Donde tenemos
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La rima ABBA
00:43:20
Y luego los tercetos
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Que se hacen de manera más libre
00:43:25
Vamos a ver como los ha hecho
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Amargo, largo, 14C
00:43:27
Y corto, esto sería una nueva rima
00:43:29
Pero cuidado que como es de arte menor
00:43:33
Tenemos que poner la letra en minúscula
00:43:35
7D
00:43:38
Y luego agonía
00:43:39
va a rimar con lo del principio, 14A, aquí se me ha olvidado poner 14, y soporto, ¿con qué va a rimar?
00:43:41
Con corto, entonces este es D, pero D mayúscula, y melancolía, que rima con agonía, 14A, ¿vale?
00:43:51
Los tercetos siempre suelen ir por libre, o sea, que se puede rimar más o menos como uno quiera,
00:43:58
Siempre que tenga cierto orden
00:44:06
Y ya está
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Bueno, pues esto en cuanto a la métrica
00:44:08
Que era la primera pregunta
00:44:11
Y me estoy extendiendo mucho, pero bueno
00:44:13
Entonces, en cuanto a contenido
00:44:15
Vamos a ver el contenido
00:44:20
Hermano, tú que tienes la luz
00:44:22
Voy a borrar esto
00:44:24
Casi mejor, porque está esto muy guarreado
00:44:25
Vale
00:44:28
Entonces
00:44:31
Hermano, tú que tienes la luz
00:44:33
Dime la mía
00:44:36
Este hermano no es que sea su hermano. Es una manera de empezar un poema, es una llamada, una apóstrofe, una apelación, una llamada, una apelación, apóstrofe.
00:44:37
Apostrofar es como clamar a alguien, ¿no? Hermano, o Dios, o cielos, ¿no? Hermano, ¿tú qué tienes la luz? Entonces se está refiriendo a alguien que está en su misma situación. Está inventándose un interlocutor que habría que explicarlo, claro, se refiere a alguien que pueda entender su situación.
00:44:56
Tú que tienes la luz, dime la mía. Entonces tenemos aquí una primera metáfora, una metáfora complejísima, porque la luz siempre ha sido un término muy asociado a la metafísica, a lo divino, a algo que ilumina.
00:45:18
Tú que tienes la luz, dime la mía. Entonces, él no tiene luz y está buscando en alguien que le pueda ayudar a ver su luz. Y aquí vamos a ver que efectivamente no tiene luz y por lo tanto no sabe a dónde va. Soy como un ciego.
00:45:34
Tenemos aquí un símil, ¿no? Símil, ya sabemos que es una comparación, ¿vale? Voy sin rumbo y ando a tientas, ¿vale? Esto es redundante casi, podemos hablar de... ¿cómo se llamaba? El de cuando se... un pleonasmo.
00:45:53
Un pleonasmo es una suposición, algo que ya se supone.
00:46:13
Un pleonasmo es la figura retórica que consiste en añadir enfáticamente a una frase
00:46:21
más palabras de las necesarias para su composición con el fin de embellecer o añadir expresividad a lo que se dice.
00:46:30
Lo he visto con mis propios ojos.
00:46:35
Si lo has visto, obviamente lo has visto con tus ojos.
00:46:38
entonces
00:46:41
con mis propios ojos sobra
00:46:42
subir arriba
00:46:45
esto es otro pleonasmo, si subes, subes arriba
00:46:47
claro, entonces
00:46:50
voy sin rumbo
00:46:51
y si voy sin rumbo y además
00:46:54
estás ciego, pues obviamente vas a tientas
00:46:55
ando a tientas, ando
00:46:58
palpando ahí a ver por donde voy
00:46:59
voy
00:47:01
bajo tempestades y tormentas
00:47:03
podríamos hablar aquí de una pequeña
00:47:05
anáfora
00:47:07
Al empezar dos oraciones con voy, anáfora, bajo tempestades y tormentas, ciego de ensueño y loco de armonía.
00:47:09
Y aquí la repetición de la palabra ciego también es interesante porque todo lo que se repite es para enfatizar, entonces podríamos llamar la atención sobre esta ceguera.
00:47:21
Pero es una ceguera muy poética, porque aquí además tenemos unos términos que parecen casi antitéticos un poco, porque primero está hablando de tempestades y tormentas, y luego está diciendo que está en una armonía.
00:47:32
Entonces, ¿en qué quedamos?
00:47:55
Pues aquí hay una oposición o contraste de elementos que podríamos decir que es una especie de antítesis.
00:47:57
Claro, entonces, loco de armonía.
00:48:05
Si uno está loco normalmente lo pasa mal o está, bueno, pues no sé, de alguna manera está fuera de sí o lo que sea.
00:48:08
Pero esta locura es una locura de armonía.
00:48:14
Aquí podríamos incluso hablar de un oxímoron. Un oxímoron, ya sabéis que es una figura retórica que, uniendo contrarios, consigue destacar más uno de ellos, o algo así.
00:48:19
Figura retórica que consiste en complementar una palabra con otra que tiene un significado contradictorio u opuesto.
00:48:34
¿Vale? Complementar una palabra con otra
00:48:39
El oxímoron no es una antítesis
00:48:42
Una antítesis sería blanco y negro
00:48:46
Pero el oxímoron es complementar una palabra
00:48:49
Entonces es como decir la negra blancura o algo así
00:48:52
Por ejemplo, eso sería un oxímoron
00:48:55
Entonces aquí tenemos este loco de armonía
00:48:57
Que parece que es algo imposible
00:49:03
Y ya nos va a poner un poco en tono de lo que le pasa
00:49:05
Ese es mi mal, soñar. Soñar, desear, cuando veo soñar en poesía siempre podemos hablar de no soñar como tal, como fase onírica, como fase del sueño donde se nos presentan imágenes absurdas.
00:49:09
Si hablamos de nuestros sueños siempre van a ser absurdos. Entonces soñar poéticamente se refiere como a desear o incluso a pensar movido por la inspiración o un pensamiento de estos irreflexivo, irracional, unos de estos pensamientos no dirigidos que podríamos decir porque son ideas que se nos van ocurriendo y todo eso.
00:49:31
Entonces ese es mi mal, soñar. Y nos va a decir aquí esta frase que es muy interesante y nos la preguntan luego. La poesía es la camisa férrea de mil puntas cruentas que llevo sobre el alma.
00:49:57
entonces esta definición de poesía que nos da
00:50:14
es algo que merece estudiarla aparte casi
00:50:18
y está relacionado con esto que nos está diciendo
00:50:24
con soñar y con esta locura
00:50:28
la poesía es la camisa férrea, o sea de hierro
00:50:31
de mil puntas cruentas, de mil puntas crueles
00:50:36
por lo tanto con pinchos que llevo sobre el alma
00:50:40
Es casi como de esos instrumentos de tortura, ¿no? La poesía es una tortura para él también.
00:50:43
Y dice que esas espinas sangrientas, seguimos metafóricamente hablando de ese dolor que le está produciendo la poesía, dejan caer las gotas de mi melancolía.
00:50:54
De nuevo, estamos hablando metafóricamente todo, ¿no? Que deja caer, o sea, que todo esto vendría a decir que la poesía, en gran parte, le hace sufrir y le está haciendo expresar tristeza, su melancolía, ¿no?
00:51:06
la poesía le hace expresar
00:51:28
melancolía, le hace expresar tristeza
00:51:30
pero claro
00:51:33
fijaos que es que dice
00:51:35
loco de armonía
00:51:36
entonces
00:51:37
y en el que está en ensueño
00:51:38
ensueño ya no es
00:51:43
algo malo, ciego de ensueño
00:51:44
de ensueño estar
00:51:47
en ensueño es algo agradable
00:51:48
y está loco de armonía
00:51:51
o sea que es que
00:51:53
vamos a ver que es una especie de
00:51:54
por así decir
00:51:56
de vocación que tiene que le causa un dolor porque está pasando tristeza y la expresión de esa tristeza es algo que hace por vocación
00:51:57
pero que le produce también cierto dolor. Y así voy, ciego y loco. Ciego y loco. Vamos, esto es interesante porque es, por un lado,
00:52:10
Tendríamos que explicar cada palabra. Ciego de no ver, quizá de no querer ver, y loco de armonía. Estamos hablando de loco de armonía, de entusiasmado por hacer poesía, por este mundo amargo.
00:52:21
a veces me parece que el camino es muy largo
00:52:38
y que a veces es muy corto
00:52:41
bueno, esto es casi, diríamos
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para mí estos versos son de relleno
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totalmente, está haciendo una especie de juego
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que queda muy bien
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suena muy bien, pero pues es una
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obviedad, ¿no? esto pues sí que a veces
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la vida, el camino, esto sería metáfora
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de la vida, del recorrido vital
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tópico del homo viator
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es el tópico de
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pues eso
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Es el tópico del hombre viajero, hombre de paso por la tierra, peregrino, ¿no? Antiguo tópico literario, ¿vale? Donde, bueno, pues se ve que está recorriendo este mundo amargo.
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Y en este titubeo de aliento y agonía, tenemos muchas bimembraciones. Bimembraciones es decir una palabra y otra. Aliento y agonía, ciego y loco, son bimembraciones. No sé si buscarlo, a ver qué viene aquí en bimembración.
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Bimembración consiste en dividir una frase o verso en dos miembros equidistantes, de manera que las palabras incluidas en cada miembro pertenecen a la misma categoría gramatical y están colocadas en el mismo orden.
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Entonces, ciego y loco.
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Cargo lleno de penas, lo que apenas soporto.
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Y fijaos cómo bien suena esto, ¿no?
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Cargo lleno de penas, lleno de penas, otra vez, de pesadumbre, de tristeza, lo que apenas soporto.
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porque ya apenas puede resistirlo, ¿no? Y, penas y apenas, esto para mí es una paronomasia, ¿vale? Una paronomasia es semejanza fonética entre dos o más palabras que únicamente se diferencian por una vocal o una consonante.
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Roja, reja, pero, pera, misa y mesa, por así decir.
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Son palabras que se parecen fonéticamente pero que no tienen el mismo significado.
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Entonces, cargo lleno de penas, lo que apenas, paronomasia.
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Son parónimos.
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Los parónimos son dos palabras que se parecen fonéticamente pero que no significan lo mismo.
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Entonces, la figura retórica se llama paronomasia.
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¿Y no oyes caer las gotas de mi melancolía? Esta pregunta retórica, ¿no? Una pregunta retórica porque está claro que después de decir todo esto, pues sí, oímos tu melancolía, sí, ¿vale?
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Y también es interesante un poco de que siempre hay percepciones sensoriales, ¿no?
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Estamos hablando de luz y luego está diciendo no oyes, ¿no?
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Tenemos aquí luz, sonido, ¿no? Percepción de la vista, del oído.
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Las gotas casi podemos pensar también en humedad, que casi podemos presentir también por el olfato, el tacto, ¿no?
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O sea que todo esto sería rasgos del modernismo.
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Y por supuesto, pues este es un poema totalmente melancólico que tiene que ver con la etapa final de Rubén Darío.
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Vale, pues nada, creo que voy a parar aquí la grabación porque creo que está quedando muy largo.
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Y ya en otro momento grabo otra clase.
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- Idioma/s:
- Autor/es:
- Eduardo Madrid Cobos
- Subido por:
- Eduardo M.
- Licencia:
- Reconocimiento
- Visualizaciones:
- 33
- Fecha:
- 13 de mayo de 2022 - 20:41
- Visibilidad:
- Público
- Centro:
- CEPAPUB ORCASITAS
- Duración:
- 56′ 02″
- Relación de aspecto:
- 1.78:1
- Resolución:
- 1920x1080 píxeles
- Tamaño:
- 556.64 MBytes