Vídeo resumen "El origen de la vida", 4º ESO, Biología

Hoy vamos a ponernos el sombrero de detectives cósmicos, porque vamos a investigar uno de 00:00:00

los mayores misterios que existen, una pregunta que nos hemos hecho desde el principio de 00:00:05

los tiempos y que, en el fondo, define quiénes somos. 00:00:09

Esa es la gran pregunta, ¿verdad? El caso sin resolver por excelencia. Para intentar 00:00:13

responderla, vamos a seguir el rastro de pistas que la ciencia ha ido juntando, un puzle gigantesco 00:00:18

que nos va a llevar desde los orígenes de nuestro planeta hasta los rincones más lejanos 00:00:23

del universo. 00:00:27

A ver, antes de nada, si buscamos el origen de la vida, tenemos que tener claro qué es 00:00:28

exactamente lo que estamos buscando. La vida, en esencia, es un sistema increíblemente 00:00:33

organizado que consigue procesar energía, responder a lo que le rodea y, por supuesto, 00:00:37

hacer copias de sí misma. Estas tres cosas son las que definen a nuestro objetivo. El 00:00:41

verdadero misterio es, ¿cómo demonios surgió algo tan complejo a partir de materia que 00:00:45

en principio no tenía nada de especial? Bueno, pues toda buena investigación empieza 00:00:49

descartando pistas falsas. Y en este caso vamos a empezar por un sospechoso muy, muy antiguo. Una 00:00:54

idea que, aunque hoy nos suene un poco rara, fue la explicación principal durante miles de años. 00:01:00

La idea era súper simple. De la carne en descomposición salían gusanos. Del trigo 00:01:06

almacenado aparecían ratones. La vida simplemente surgía. Parecía lógico, porque era lo que se veía 00:01:11

a simple vista. El problema, como vamos a ver, es que mirar a simple vista a veces no es suficiente. 00:01:17

Y aquí es donde la cosa se pone interesante. La primera grieta seria en esta teoría apareció en 00:01:23

el siglo XVII. Francesco Redi hizo un experimento brillante por lo sencillo que era. Puso carne en 00:01:29

tres frascos, uno abierto, otro tapado con una tela y el último cerrado del todo. El resultado, 00:01:35

pues que los gusanos sólo aparecían donde las moscas habían podido entrar a dejar sus huevos, 00:01:41

de repente la generación espontánea ya no parecía tan clara. Pero el golpe de gracia, 00:01:45

el que cerró el caso para siempre, lo dio Louis Pasteur. Él demostró que ni siquiera los microbios, 00:01:50

esos seres invisibles, aparecían de la nada. Usó un matraz con un cuello muy largo y curvado. El 00:01:56

aye podía entrar, pero el polvo y los microbios se quedaban atrapados en la curva. El caldo de 00:02:02

dentro se mantenía perfecto, estéril. Sólo cuando rompía el cuello y los microbios caían dentro, 00:02:07

aparecía la vida. Se acabó. Caso cerrado para la generación espontánea. Vale, una vez descartado 00:02:12

el viejo mito, la investigación moderna se centra en dos grandes sospechosos. Dos hipótesis que 00:02:18

compiten cara a cara para explicar de dónde salió esa primera chispa de vida. Y aquí los tenemos. 00:02:24

Por un lado, la panspermia, que básicamente dice que la vida es extraterrestre, que vino de fuera. 00:02:30

Y por otro, la abiogénesis, que defiende que la vida es un producto local, que se fabricó aquí 00:02:36

mismo? Vamos a analizar las pruebas de cada uno. La idea de la panspermia es muy potente. Sugiere 00:02:42

que los ingredientes básicos de la vida, o incluso la vida misma en forma de microbios, 00:02:48

viajan por el universo a bordo de meteoritos o cometas. Si uno de estos pasajeros cósmicos 00:02:53

cae en un planeta con agua y buenas condiciones, como era la Tierra, pues bingo, la vida podría 00:02:57

empezar a prosperar. Es una teoría fascinante, pero tiene un pequeño problema. En realidad no 00:03:02

resuelve el misterio, solo lo cambia de sitio. La otra gran hipótesis, la biogénesis, nos cuenta 00:03:07

una historia de origen completamente terrestre. Nos dice que la vida se cocinó aquí, en nuestro 00:03:13

propio planeta. En una tierra primitiva que era un lugar brutal, lleno de volcanes, rayos y una 00:03:19

radiación solar tremenda. En ese caos, la química normal, la inorgánica, dio un salto increíble y se 00:03:24

convirtió en biología. De hecho, el bioquímico Alexander Oparin propuso algo así como una receta 00:03:30

para la vida. Imagínenlo, tienes una atmósfera primitiva, sin oxígeno, que es bombardeada sin 00:03:36

parar por rayos y radiación. Esa energía rompe los gases y los recombina formando las primeras 00:03:41

moléculas orgánicas sencillas. Estas moléculas caen a los océanos y con el paso de millones de 00:03:47

años los convierten en una especie de sopa caliente. Y en esa sopa, poco a poco, las moléculas empiezan 00:03:52

a juntarse y a formar estructuras más complejas, los abuelos lejanos de las primeras células. 00:03:58

Y ojo, que esto no es solo una idea bonita. 00:04:03

Se puso a prueba. 00:04:05

En los años 50, Miller y Urey montaron un experimento en su laboratorio para simular 00:04:07

esa tierra primitiva. 00:04:11

Metieron los gases que se creía que había, añadieron agua para hacer de océano y le 00:04:12

metieron chispazos para simular los rayos. 00:04:16

¿Y qué pasó? 00:04:19

Pues que al cabo de unos días el agua se había llenado de aminoácidos, los mismísimos 00:04:19

ladrillos con los que se construyen las proteínas. 00:04:23

Fue una prueba brutal. 00:04:26

Y por si fuera poco, tenemos pruebas físicas. 00:04:28

Fósiles. 00:04:31

Estos que vemos son estromatolitos, y son la evidencia de vida más antigua que hemos 00:04:32

encontrado. Tienen unos 3.500 millones de años. Son, básicamente, rocas construidas 00:04:37

capa a capa por colonias de microbios, como si fueran las ruinas de las primeras ciudades 00:04:44

de la vida en la Tierra. Una prueba de que, hace muchísimo tiempo, algo ya estaba vivo 00:04:48

aquí. Vale, todo apunta a que la vida pudo empezar aquí. Pero claro, esto nos lleva 00:04:53

inevitablemente a la siguiente pregunta. ¿Si pasó en la Tierra, pudo haber pasado en otros sitios? 00:04:59

Y así es como la investigación sobre el origen de la vida se convierte en una búsqueda 00:05:05

interplanetaria. Cuando se busca vida ahí fuera, no se buscan hombrecillos verdes. Lo que se buscan 00:05:09

son biomarcadores. Pensemos en ellos como las huellas dactilares químicas que la vida deja 00:05:15

a su paso. Puede ser un gas concreto en la atmósfera de un planeta, un tipo de molécula 00:05:20

en su superficie, pistas que nos digan aquí ha pasado algo biológico. Esto lo explica 00:05:24

de maravilla. Cuando la luz de una estrella atraviesa la atmósfera de un planeta, los 00:05:30

gases de esa atmósfera dejan una especie de código de barras en la luz. Analizando 00:05:34

ese código, podemos saber de qué está hecha. La atmósfera de la Tierra tiene una firma 00:05:38

química muy particular, llena de oxígeno y metano que grita «aquí hay vida». Eso 00:05:42

es justo lo que se busca en otros mundos. Y con esto llegamos a la pista más extraña, 00:05:47

más desconcertante de toda nuestra investigación. 00:05:52

Una prueba que no es un fósil ni una molécula. 00:05:55

Es una señal de radio que lleva casi 50 años volviendo locos a los astrónomos. 00:05:58

Para entenderlo, hay que hablar del programa SETI. 00:06:03

Es básicamente un esfuerzo científico para escuchar el universo. 00:06:06

Llevan décadas apuntando radiotelescopios gigantes al cielo, 00:06:09

esperando captar algo que rompa el ruido de fondo cósmico. 00:06:12

Una señal artificial, una prueba de que no estamos solos. 00:06:15

Imaginen la escena. Décadas de silencio. Y de repente, una noche de agosto de 1977, 00:06:19

durante 72 segundos exactos, el radiotelescopio Big Ear captó algo. Una señal potentísima, 00:06:25

muy específica. Justo el tipo de señal que, en teoría, enviaría una civilización extraterrestre. 00:06:30

El astrónomo que estaba revisando los datos impresos, Jerry Ekman, se quedó de piedra. 00:06:36

La señal era tan clara, tan intensa y tan extraña, que cogió un bolígrafo rojo, 00:06:40

rodeó la secuencia de letras y números que la representaba 00:06:45

y escribió al lado la única palabra que se le ocurrió, 00:06:48

WOW, y con ese nombre se quedó. 00:06:51

Y aquí está el quit de la cuestión. 00:06:54

La señal WOW es un misterio con mayúsculas. 00:06:56

Cumplía todos los requisitos de una posible señal inteligente, 00:06:59

pero venía de una zona del cielo aparentemente vacía 00:07:02

y lo más frustrante de todo, 00:07:05

a pesar de apuntar a ese mismo punto miles de veces, 00:07:06

nunca jamás se ha vuelto a escuchar nada parecido. 00:07:10

Y así cerramos nuestro informe de hoy con esta pregunta en el aire 00:07:12

¿Qué fue la señal WOW? 00:07:16

¿Una llamada perdida de otra civilización? 00:07:18

¿Un fenómeno natural rarísimo que aún no entendemos? 00:07:20

El universo guarda muy bien sus secretos 00:07:23

Pero una cosa está clara 00:07:26

La investigación continúa 00:07:27

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