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De la primera salida del ingenioso Don Quijote 2ºJ

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Subido el 11 de mayo de 2016 por Teresa Pilar M.

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Preparado ya, decidió ponerse en camino para enmendar cuanto antes tantos agravios e injusticias como había en el mundo. 00:00:23
Pero le asaltó un pensamiento terrible. Nadie le había nombrado caballero, por lo que, según la ley de caballería, no podría combatir con ningún caballero. 00:00:30
Esto le hizo titubear, pero pudo más su locura y decidió pedirle al primero que se topase que le armase caballero. 00:00:40
Iba nuestro flamante aventurero pensando... 00:00:47
¿Quién lo duda? El sabio que en el futuro escriba cómo salía al campo esta mañana, diga. 00:00:50
Apenas amaneció por la faz de lancha y espaciosa tierra las doradas hebras de sus hermosos cabellos, 00:00:55
cuando el famoso caballero Don Quijote de la Mancha subió sobre Rocinante y comenzó a cabalgar por el conocido campo de Montiel. 00:01:01
Y mientras cabalgaba bajo un sol ardiente, ensaltaba disparates similares imitando el lenguaje de su escritura. 00:01:09
Dichoso siglo aquel en que saldrán a la luz las famosas hazañas mías. 00:01:17
Oh, princesa de Ucineo, acordaos de este vuestro fiel corazón que tantos pesares por vuestro amor padece. 00:01:22
Anduvo todo el día hasta que se hizo de noche. 00:01:28
Amo y Rocín se encontraban agotados cuando vieron un avento. 00:01:30
Que don Quijote tomó por un hermoso castillo, con torres y puente elevadizo, y hacia ella se encaminó. 00:01:34
En la puerta estaban dos rameras. 00:01:41
Un porquero tocó un cuerno para llamar a sus cerdos, y el aventurero interpretó que algún músico le daba la bienvenida. 00:01:43
Las dos mujeres se echaron a correr asustadas, y Don Quijote les gritó. 00:01:51
—No enfuyan a las doncellas, que la orden de caballería que profeso prohíbe hacer daño alguno a nadie, y mi intención es solo serviros. 00:01:55
Las mujeres, aunque no entendieron bien lo que aquel caballero les decía, se echaron a reír por su apariencia y por oírse llamar doncellas. 00:02:02
Hasta que salió el ventero, gordo y por lo tanto pacífico, que se sorprendió 00:02:11
Si el señor caballero busca lecho, en esta venta no hay ninguno 00:02:15
Si busca posada, le encontrarán en abundancia 00:02:19
Para mí, señor del castillo, cualquier cosa basta, que mi descanso es pelear 00:02:22
Respondió don Quijote 00:02:26
Pidió luego que cuidaran de su valioso caballo 00:02:28
Mientras las dos doncellas desarmaban a don Quijote 00:02:31
Las mozas le preguntaron si quería comer 00:02:34
Cualquier llantaría 00:02:37
Para mí, señor del castillo, cualquier cosa basta, que mi descanso se lea en favor del género humano. 00:02:38
Y es que me arméis, caballero. Esta noche en la capilla velaré armas y mañana se cumplirá mi deseo de buscar aventuras por el mundo. 00:02:45
¡Oh, tú! Atrevido caballero, mira lo que haces o no te atrevas a tocar mis armas si no quieres pagar con tu vida, boceó Don Quijote. 00:02:53
Al arriero no le importó la amenaza. Sacó las armas del abrevadero y las arrojó. 00:03:01
Don Quijote, alzando los ojos al cielo, dijo, 00:03:06
¡Socorredme, mi señora Dulcinea, en esta primera afrenta! 00:03:09
¡Soed y baja, canalla! Venid, veréis el pago que lleva vuestra sandez. 00:03:13
El ventero trajo un libro de cuentas de la venta, se acercó a Don Quijote con las dos mozas y un muchacho. 00:03:17
Comenzó a murmurar como si rezara, mientras le daba con la espalda un golpe en el cuello y un espaldarazo. 00:03:24
Le pidió a una de las mozas que le ciñera la espalda, lo que ésta hizo. 00:03:30
Todos contenían la risa en vista de lo que antes había sucedido. 00:03:36
Mientras, la otra moza le calzaba las espuelas. 00:03:40
Don Quijote agradeció los gestos y las palabras de las dos. 00:03:43
Terminada la rápida ceremonia, Don Quijote ensilló su caballo y agradeció al ventero su favor y salió de la venta a Lomas de Rocinante. 00:03:47
El ventero, aliviado por su marcha, no le pidió dinero y le dejó ir. 00:03:56
La del alba sería cuando Don Quijote, contento y gozoso, salió de la venta. 00:04:00
Pero recordó los consejos del ventero y decidió volverse a buscar como escudero a un vecino, por lo que guió a Rocinante a casa. 00:04:05
Poco había andado cuando escuchó en unos lamentos que salían de la espesura del bosque y se dijo, 00:04:14
Aquí ya hay un guión y ya empieza a hablar Lucia. 00:04:20
Gracias doy al cielo, pues tan pronto me permite cumplir con lo que toca a mi profesión como es ayudar a algún menesteroso. 00:04:30
Se encaminó hacia donde había las voces, y allí vio a un muchacho de unos quince años, atado en el cino, al que un ladrador estaba azotando con una correa. El muchacho gritaba, 00:04:36
No lo haré más, señor, cuidaré mejor el rebaño. 00:04:46
Y viendo don Quijote lo que pasaba, exclamó, 00:04:49
Descortés caballero, subid sobre vuestro caballo, tomad la lanza, y yo mostraré que cobarde es lo que hacéis. 00:04:52
Subido por:
Teresa Pilar M.
Licencia:
Reconocimiento
Visualizaciones:
97
Fecha:
11 de mayo de 2016 - 13:02
Visibilidad:
Público
Centro:
IES SALVADOR ALLENDE
Duración:
05′ 39″
Relación de aspecto:
1.79:1
Resolución:
1072x600 píxeles
Tamaño:
79.89 MBytes

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