Activa JavaScript para disfrutar de los vídeos de la Mediateca.
Podcast_Taller de escritura_Junio 2024 - Contenido educativo
Ajuste de pantallaEl ajuste de pantalla se aprecia al ver el vídeo en pantalla completa. Elige la presentación que más te guste:
Buenos días, buenas tardes o buenas noches. Dejamos el saludo a su propia conveniencia.
00:00:06
Este podcast nace en este preciso instante a manos del alumnado del Taller de Escritura
00:00:12
Creativa del CEPA Paracuellos de Jarama, que tuvo la brillante idea de darle voz a su palabra
00:00:16
escrita. El taller está formado por tres escritoras y tres escritores con muchas ganas
00:00:22
de contar y de compartir. Son estas ganas y el placer por la escritura los que nos traen
00:00:28
y hasta aquí. En esta primera entrega vamos a leer algunos de los textos creados durante el curso,
00:00:34
en concreto aquellos que han sido elaborados partiendo de una misma premisa, la de iniciar
00:00:40
los relatos con la misma frase con la que el escritor italiano Antonio Di Benedetto da comienzo
00:00:45
a su cuento Las poderosas improbabilidades. Mi nombre es Susana Rivas, soy la profesora de este
00:00:51
taller y antes de dar comienzo a las presentaciones de los autores y autoras de los textos que ellas
00:00:57
y ellos mismos van a leer, me gustaría darles las gracias por haber creado un maravilloso y acogedor espacio
00:01:03
en el que cada semana me ofrecen la oportunidad de aprender más y más.
00:01:08
Y sin mayor demora, arrancamos con la presentación de una de las protagonistas de esta emisión.
00:01:14
Hace 40 años, 49, perdón, nace en la ciudad de Caracas, Venezuela, Alejandra Mayer.
00:01:21
Casi con el traje de bautizo puesto, se traslada a vivir a Madrid.
00:01:27
casada, felizmente no sabemos
00:01:30
y madre de dos hijos a los que quiere y odia a partes iguales
00:01:33
al menos hasta que pasen la adolescencia
00:01:37
deseosa de que el libro que tiene escrito sobre su vida
00:01:39
vea al fin la luz
00:01:43
Esta historia mía pudo ser una historia de amor
00:01:44
Robert llegó a su casa
00:01:50
al mirar el periódico de aquel día se dio cuenta que era su cumpleaños
00:01:52
su mayordomo le informó de dos últimas visitas que había recibido
00:01:55
y le dejó encima de la bandeja el correo
00:02:00
Todos los años por su cumpleaños recibía un ramo de flores que siempre acomodaban en el viejo jarrón azul que presidía el salón
00:02:02
Pero este año por alguna razón estaba vacío
00:02:09
Revisó el correo y entre las cartas que había en el montón asomaba una
00:02:12
Venía sin remitente, sin dirección
00:02:18
Rube pudo apreciar que dentro del sobre raído había una carta
00:02:21
Escrita aparentemente de forma precipitada
00:02:26
Con letra femenina y un tanto temblorosa
00:02:29
Había despertado en él la curiosidad
00:02:31
Así que se dispuso a abrirlo y comenzó a leer
00:02:34
Mi hijo murió ayer
00:02:36
Permanecí sentada a su lado
00:02:39
Sostuve paños fríos sobre su riente sien
00:02:41
Y al tercer día me derrumbé
00:02:44
Creo que yo también estoy enferma
00:02:46
Ahí ha quedado mi pobre niño
00:02:48
Tendido en su estrecha cuna
00:02:50
En la misma postura del momento en que murió
00:02:52
A veces se me oscurece la vista
00:02:54
Pero quiero reunir todas mis fuerzas
00:02:57
Para acabar de escribirte esta carta
00:02:59
hablarte a ti, amor mío, que nunca me conociste
00:03:01
tendrías que conocer mi vida, que siempre fue la tuya
00:03:04
aunque nunca lo supiste
00:03:08
solo tú conocerás mi secreto
00:03:10
cuando esté muerta y ya no tengas que darme respuesta
00:03:12
si sostienes esta carta entre tus manos
00:03:15
sabrás que una muerta te está explicando aquí su vida
00:03:18
una vida que siempre fue tuya
00:03:21
no te inquietes por lo que te digo
00:03:23
una muerta ya no quiere nada
00:03:26
ni amor, ni compasión
00:03:28
Solo quiero descubrirte mi vida, la verdadera, la que comenzó el día en que te conocí.
00:03:30
Cuando llegaste yo tan solo tenía trece años.
00:03:36
Vivía en el mismo edificio donde vivías tú y donde en ese preciso instante estás leyendo esta carta.
00:03:39
Te veía como entrabas y salías con muchas y diferentes mujeres,
00:03:46
pero ninguna te ha querido tan devotamente como lo he hecho yo.
00:03:49
Desde los trece a los dieciséis años vivía cada hora dentro de ti.
00:03:52
besaba el picaporte de la puerta que minutos antes había tocado tu mano
00:03:56
mi hijo murió ayer por la noche
00:04:00
ahora volveré de nuevo a estar sola
00:04:02
si es que tengo que seguir viviendo
00:04:05
mañana vendrán unos hombres de negro cargados con un ataúd
00:04:07
y colocarán dentro a mi pobre hijo, mi único hijo
00:04:11
nunca te diste cuenta de mi presencia
00:04:14
aunque estaba cada noche en tu calle
00:04:17
tanto si nevaba como si soplaba el viento
00:04:19
a menudo esperaba horas en vano
00:04:21
Otras veces me daba con la desagradable sorpresa que después de esperar salías escoltado por compañía femenina.
00:04:24
Una noche por fin te diste cuenta.
00:04:32
La casualidad quiso que esa noche nos cruzáramos por la calle y tu mirada distraída me acarició sin querer.
00:04:35
De repente y sin necesidad de darme la vuelta supe que, por primera vez, escucharía tu adorable voz, dirigida hacia mí.
00:04:41
Me preguntaste si quería que fuéramos a cenar juntos y obviamente acepté.
00:04:48
Comimos en un pequeño restaurante.
00:04:52
¿Recuerdas? Supongo que no distinguirías esa velada de otras tantas parecidas
00:04:54
Hablé poco, aunque estaba plenamente feliz por tenerte por fin cerca, solo para mí
00:04:59
Después de un instante de vacilación me preguntaste si quería ir un rato a tu casa
00:05:05
Me encantaría, te dije sin pensarlo
00:05:09
Subimos a tu casa, estuvimos toda la noche juntos
00:05:12
Al día siguiente me desperté temprano, mucho antes de que tú despertaras
00:05:16
Tenía que irme a trabajar
00:05:20
antes de marcharme ya habíamos dicho que podíamos vernos de nuevo
00:05:21
volví una vez y fue más maravilloso
00:05:27
aún me regalaste una tercera noche más
00:05:30
después me dijiste que salías de viaje y me prometiste avisarme cuando volvieras
00:05:32
esperé
00:05:36
estuve esperando y esperando como una loca pero no me llamaste
00:05:37
no me escribiste, ni una línea, ni una
00:05:41
mi hijo murió ayer, también era el tuyo
00:05:43
ahora ya no me queda nadie a quien querer
00:05:46
Vuelvo a estar sola, más sola que la una
00:05:49
No tengo nada, no me queda nada ya de ti
00:05:51
Solo he necesitado hablarte esta vez
00:05:54
Después volveré a mi escondito como siempre
00:05:56
Muda
00:05:59
Solo cuando esté muerta recibirás esta carta
00:06:00
Y ya no te podré oír
00:06:03
Ya no puedo seguir escribiendo
00:06:04
Me pesa la cabeza, me duelen las articulaciones
00:06:06
Y tengo mucha fiebre
00:06:09
Creo que tendré que tumbarme enseguida
00:06:10
Si no me echarás de menos
00:06:13
Y eso me consuela
00:06:15
No cambiará para nada tu vida
00:06:16
No te causo dolor con mi muerte, eso me consuela
00:06:18
¿Quién te enviará flores por tu cumpleaños?
00:06:21
Ay, Robert, el jarrón azul que tienes en el salón estará vacío para siempre
00:06:24
Robert dejó caer la carta
00:06:28
Le temblaban las manos, empezó a cavilar y al fin recordó
00:06:31
En su memoria asomó vagamente cuál era la mujer que le había escrito
00:06:34
y con la que sin saberlo había tenido un hijo
00:06:39
Entonces su mirada se dirigió casi de forma autómata hacia el jarrón azul del salón
00:06:41
Por primera vez en años estaba vacío en su cumpleaños y se asustó.
00:06:47
Pensó en aquella mujer invisible y apasionada como quien recuerda una lejana melodía.
00:06:51
Muchas gracias Ale por esa historia tan triste y al mismo tiempo tan bonita.
00:06:57
Damos paso ahora a nuestro siguiente escritor, Carlos Ranz, quien se define como
00:07:03
transeúnte por la vida, acrata burgués, inconformista y redento, informático y electrónico,
00:07:08
De estudios de ciencias y de corazón de letras
00:07:15
51 años haciendo que trabaja para vivir
00:07:17
Hijo, padre, abuelo y padre tardío otra vez
00:07:21
Sigue tratando de mantener la curva de aprendizaje viva
00:07:24
Intentando escribir, entre otras cosas
00:07:28
No cree en el hombre, ser idiota donde lo haya
00:07:30
Que no cesa de matar desde que puso el pie en este mundo
00:07:34
Según él
00:07:37
Esta historia mía pudo ser una historia de amor
00:07:38
Con el permiso de la inteligencia artificial
00:07:42
Mi pareja y yo ya no teníamos edad para tener hijos, aunque siempre nos hubiera gustado tener al menos dos.
00:07:45
Se pasó el tiempo, llegamos a los 70 años y la vida se mira de otra forma.
00:07:54
Ahora quiero sentirme como un dios, ser creador a través de convertir mi pensamiento en un hecho.
00:07:58
No quiero morirme sin ser procreador y para ello cuento con la inestimable ayuda de mi imaginación,
00:08:06
la inteligencia artificial y la realidad virtual.
00:08:12
Yo procreo Antonio, digo cuándo y dónde nace, pero me reitero,
00:08:16
soy su padre sin necesidad de madre, sin espermatozoide ni óvulo por medio que fecundar.
00:08:22
Un pamadre o mapadre, me da igual.
00:08:27
Mi imaginación hace que Antonio nazca en Vallecas, un barrio obrero de Madrid.
00:08:30
Sale directamente a la vida con siete años.
00:08:36
Es un chico muy despierto, activo y no habla mucho.
00:08:38
Va al colegio del barrio. Allí forma parte de la pandilla de Luis el Moco, mote bien puesto,
00:08:42
pues siempre va con las velas en la nariz, que se quita con el puño izquierdo de la camisa de turno.
00:08:48
Sus travesuras se quedan en algún que otro reproche por parte del profesor de turno. Nada que sea un disgusto.
00:08:54
Su punto fuerte es el juego del taco. Un tacón de zapato de caballero o una china de superficie bien lisa
00:09:01
de unos 10 por 10 centímetros son el instrumento indispensable de este entretenimiento. Hay
00:09:08
varias modalidades que consisten en una en dar a los demás y llevarse cromos de la liga
00:09:14
de fútbol que previamente se han apostado o bien tirando a una especie de ruleta con
00:09:19
números pintada con tiza en el suelo o dibujada sobre la tierra con la china o el palo que
00:09:24
se encuentre más a mano. Siempre llega a casa con un buen paquete de cromos en una
00:09:30
bolsita de plástico, pero ordenados en paquetitos asidos por una goma pasada con sumo cuidado por
00:09:35
los cuatro lados. Cuando le pregunto qué tal el día, siempre me dice lo mismo. Bien. Y no se inmuta,
00:09:41
yo no sé preguntar como madre y tiro de inteligencia artificial. Vuelvo a hacer la
00:09:50
pregunta sugerida por la inteligencia artificial dándole mi toque personal, pero no avanzo. Mucho.
00:09:55
Bien. ¿Las mates? Un churro. ¿Lengua? Bien también.
00:10:02
Y en el recreo dándole al tacón, me dice señalándome la bolsa requeteque utilizada, que es como su gran tesoro.
00:10:07
Como soy tan mayor, he hecho a Antonio en un momento un adolescente al que le pirra cualquier ingenio con ruedas,
00:10:15
bici, moto, coche y sí, a los 16 años ya era un experto conductor de cualquier vehículo.
00:10:21
Para conducir sin miedo a multas, se hizo amigo del Trompas, tres años mayor que él
00:10:28
Se iban a un polígono industrial a medio hacer, que conchabados con el vigilante de seguridad
00:10:34
Con unas pesetas de la época por medio, les permitía demostrar lo bueno que eran conduciendo
00:10:39
Trompos, derrapajes, frenadas imposibles con algún susto incluido
00:10:45
Que no pasó de una muñeca rota por caída del moto
00:10:50
Antonio tenía el don de saber escuchar y actuar en consonancia
00:10:53
Aprendió todo lo que tenía que aprender.
00:10:59
Hizo el servicio militar como voluntario en el Ejército del Aire y me dio un disgusto.
00:11:01
Dejó la carrera de ingeniero de telecom.
00:11:06
Volví a la inteligencia artificial que me ayudara a buscar según las características de mi hijo total
00:11:09
qué era lo mejor para él.
00:11:15
No me dio tiempo.
00:11:18
Se presentó ante mí diciéndome que el siguiente lunes comenzaba a trabajar
00:11:20
vendiendo cursos para los jóvenes que no tenían acabada ni primaria.
00:11:23
Antonio tenía razón. En dos años era el jefe de ventas de su área y en cuatro de toda España.
00:11:29
Se compró un apartamento en el centro de Madrid y un deportivo inglés de la marca Lotus.
00:11:35
Iba como un tren, como los amores.
00:11:40
Yo no entendía nada, pero seguía sorprendido por lo bien que le iba.
00:11:43
Yo, como su dios padre, madre y principio de todas sus cosas, no intervenía para nada.
00:11:47
Qué poco juego me estaba dando en su vida.
00:11:53
Gracias a la inteligencia artificial le hice avanzar un poco en el tiempo
00:11:55
y un acontecimiento inesperado, la muerte de su jefe y dueño de la empresa
00:12:00
hizo que la viuda la cerrara para hacer caja
00:12:04
Antonio no se arredró y me demostró lo verdadero que es la frase
00:12:07
de cuando una puerta se cierra otra se abre
00:12:12
Se metió a vender ordenadores que venían de Estados Unidos
00:12:14
una marca poco conocida, pues entonces tres dominaban el mercado español
00:12:18
IBM, NCR y Univac que cambió su nombre por Unisys. Las pasó canutas, no había querido estudiar inglés,
00:12:23
observaba atento sus movimientos, pero él los superaba con su magia particular para convencer
00:12:31
a los posibles compradores. Sus argumentos desarmaban los contras de sus potenciales clientes
00:12:36
y reafirmaban los aspectos positivos. Era un crack como dicen ahora. En nada de tiempo demostró que
00:12:42
no siempre la vida había que ir por el camino más previsible para tener una vida cómoda,
00:12:51
placentera, estable en cuanto al trabajo. Yo no hacía nada por modificar su comportamiento.
00:12:56
Yo era su creador, procreador, y no acertaba a sentirme como tal, si como padre-madre convencional.
00:13:03
El amor por Antonio era un amor total, pero como creo que en el amor hay una gran dosis
00:13:10
de egoísmo por ver en el otro todo lo que uno tiene más lo que uno no tiene, es una
00:13:15
prolongación mejorada y aumentada por mil. Cuando me dijeron que me quedaban pocos días de seguir
00:13:20
deambulando por este mundo real, quise poner punto final a esta historia, pero no pude. Le pedí a
00:13:26
Antonio que me abrazara y siguiera viviendo, que saliera de mi imaginación, que se quedara en el
00:13:33
mundo virtual y se procreara en más Antonios Antonias, lo del sexo, género, qué más da, que
00:13:39
borrara la palabra guerra de su cerebro y estuviera siempre en un mundo que fuera mejor que en el que
00:13:45
me tocó vivir. Sí, esta historia mía puede ser una historia de amor que perdurará en el mundo virtual
00:13:51
hasta que Antonio quiera. Muchas gracias Carlos por este original relato de inteligencia más
00:13:58
emocional que artificial. Llega ahora el momento de presentar a Javier Herreros, a quien la vida
00:14:05
le empezó a enredar un domingo otoñal de noviembre. Escribe desde niño, pero es ahora,
00:14:14
libre de obligaciones laborales, cuando le dedica tiempo y ganas. Pincela su vida a través
00:14:19
de sus relatos, siempre dejando volar la imaginación.
00:14:25
Elma. Esta historia mía pudo ser una historia de amor. Doloroso como un balazo en la rodilla,
00:14:30
su escrito de despedida me escupió que esta historia, que fue mi historia de amor, se
00:14:38
terminó. Un marido enfadado por beberme sus botellas y celoso porque su mujer le recibía
00:14:42
por la tarde con una sonrisa y el pelo alborotado hizo que mi buic me llevara a una de esas ciudades
00:14:49
que sólo existen para rellenar espacios en el mapa. Por las noches me refugiaba en el Vanguard,
00:14:55
un tugurio lleno de gente con buena voluntad y mala conciencia, donde Didi Bridgewater te envolvía
00:15:02
con su voz y te convirtía en mejor persona mientras sonaban sus canciones. Mis preocupaciones
00:15:09
eran sencillas, que ni me vomitara mi vecino de barra, ni acabar con un tiro en la cabeza,
00:15:16
ni casado y con tres hijos. Aquella noche, mientras contaba mi vida una botella de algo
00:15:22
que me vendieron como whisky, sentí un ligero escalofrío en la nuca y girándome despacio
00:15:28
vi un escote del 95 largo sin silenciador apuntándome al entrecejo.
00:15:34
Cuando me sentí con fuerza, empecé a subir la mirada hasta encontrar los ojos de Elma.
00:15:40
Me invitaban a sumergirme en su azul intenso y pasar allí el resto de mi vida.
00:15:46
Se levantó a cámara lenta, recreándose.
00:15:52
Las curvas se ajustaban a su cuerpo con precisión.
00:15:55
Se acomodó el arma que aún me apuntaba y, con la calma del tigre
00:15:58
que sabe que el cervatillo no es consciente de que va a ser su cena, me susurró al oído.
00:16:02
Cielo, ¿te puedes permitir un whisky mejor y una mujer como yo?
00:16:09
Tengo una habitación muy prudente, no desvelará a nadie que vas a conocer el paraíso.
00:16:13
Cogiéndome de la mano, dejamos atrás a Didi confesando que es una mujer solitaria
00:16:19
y que solo pide al hombre de sus sueños que sea su compañía.
00:16:24
La habitación de Elma, además de ser prudente, tenía todo lo que puede desear un hombre de paso
00:16:27
Luz tenue, cama amplia y un silloncito donde dejar el remordimiento
00:16:34
Sacó dos vasos y con ojo de tasador de diamantes
00:16:39
Vertió la cantidad justa de licor para hacer desaparecer el recuerdo de la pócima
00:16:43
Que había bebido en el local donde la conocí
00:16:48
Me vas a engañar y me dirás que te has enamorado perdidamente de mí
00:16:50
o dejamos las mentiras para luego y nos inventamos quienes somos.
00:16:55
Solo quería contemplarla, acariciar su cabeza apoyada en mi regazo,
00:16:59
recorrer con mi mano ese 95 largo que todavía me amenazaba,
00:17:03
detener el tiempo e imaginar a Elma mintiéndome.
00:17:07
Ningún hombre me ha hecho disfrutar tanto como tú.
00:17:11
La noche transcurrió entre desfiles de lencería,
00:17:15
sábanas revueltas y subidas al paraíso.
00:17:18
No he sentido jamás tanta humedad en una boca y tanto amor en una vagina
00:17:20
Mi estancia en ese punto del mapa se prolongó más de lo que yo había pensado
00:17:25
Elma ya solo me cobraba por dormir en su habitación
00:17:30
Nos estábamos enamorando
00:17:34
Solo nos mentíamos por la tarde cuando hablábamos de nuestro futuro
00:17:36
Volví a la habitación de Elma después de hacer unos kilómetros al buic
00:17:40
para que no tuviera celos de ella
00:17:45
me encontré con un tipo mal encarado que pensaba que a una mujer se le acaricia con los puños
00:17:47
era un adefesio que solo le cabía una idea en el cerebro
00:17:52
y con un olor nauseabundo tan típico de quien lleva suficiente sudor encima
00:17:56
como para enseñar a nadar a las ladillas
00:18:01
su única neurona estaba exigiéndole dinero para un negocio que tenía entre manos con unos matones
00:18:04
que no aparecerán jamás como ciudadanos ejemplares en la hoja parroquial
00:18:10
Cuando le aconsejé que se calmara, también intentó manosearme con el puño
00:18:15
Se sorprendió al ver sus dientes engastados en el mantel de la mesa
00:18:20
Una pena de botella de whisky
00:18:24
Salió de la casa vociferando una melodía parecida a un fuelle roto
00:18:26
Elma me explicó que su cuñado se creía con derecho a controlar su vida, su dinero y su cama
00:18:31
Desde que su marido comprobó que no se puede nadar con un bloque de cemento en los pies
00:18:36
elma cambió con la visita de su coheñado se volvió taciturna y triste como una tarde de invierno se
00:18:41
le fue borrando la sonrisa como se olvida un recuerdo de juventud le propuse fugarnos a una
00:18:49
ciudad más cálida y grande querido no pierdas el tiempo conmigo si quieren encontrarnos nos van a
00:18:54
encontrar pasaron dos semanas y al despertarme una mañana acaricie su ausencia la llamé sólo me
00:19:00
respondió el silencio. Una nota y todo su recuerdo era lo que me quedaba de ella. El viejo
00:19:07
wick intentó animarme. Al oeste hay otro hueco en el mapa. Puede que hayan construido una ciudad
00:19:14
para rellenarlo. Muchas gracias, Javier, por esta maravillosa historia de búsqueda, escotes y
00:19:20
whisky. Continuamos ahora con otra de nuestras autoras, Cristina Vázquez. Me costó mucho nacer,
00:19:27
pero como soy tan cabezona, al final lo conseguí. Terminé con esfuerzo, pero con éxito, los estudios
00:19:36
que quería realizar. Trabajé para ser lo más independiente posible. Vivo en mi casa, con mi
00:19:42
pareja. Intento superar los nuevos retos que cada día me propongo, nos cuenta Cristina. En esta
00:19:48
ocasión no será la propia autora quien nos lea su texto, lo hará Silvia en su lugar, una de las
00:19:55
compañeras de Cristina, a quien su discapacidad motora le dificulta leer con fluidez sus
00:20:00
fantásticos escritos.
00:20:05
Esta historia mía pudo ser una historia de amor, o al menos yo la viví así.
00:20:08
Pero comencemos por el principio.
00:20:16
Era finales de septiembre, todavía hacía buen tiempo.
00:20:18
Tenía 15 años, estaba en plena adolescencia, aún iba al instituto.
00:20:22
Me quedaban dos años para terminarlo, pero a mí me gustaba.
00:20:28
Los compañeros, algunas clases, el ambiente que había.
00:20:31
He de decir que eso de levantarme temprano no lo llevaba nada bien. Tengo que reconocer que me gustaba mucho dormir, pero por suerte vivía a dos calles del instituto y aunque las clases empezaban pronto, no tenía que madrugar mucho.
00:20:34
Los profesores que me habían tocado ese año eran los mismos del año pasado. Eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes.
00:20:50
Ventajas, ya te conocían. Inconvenientes, ya te conocían.
00:20:58
Siempre me han gustado los comienzos, ese misterio de lo que está por venir.
00:21:04
La primera semana los profesores exponían a la clase sus proyectos,
00:21:09
cómo iba a ser su asignatura, exámenes, trabajos.
00:21:14
Siempre me gustó la asignatura de lengua y literatura,
00:21:18
y más aún cuando durante los últimos años me había tocado a María José,
00:21:21
una de las mejores profesores que el instituto tenía.
00:21:26
Eran los primeros días, nos dieron el horario de las clases
00:21:29
y cada profesor iba presentándose y explicando cómo iba a ser su asignatura,
00:21:33
hasta que llegó la hora de Lengua y Literatura.
00:21:38
Yo tenía muchas ganas de volver a ver a María José,
00:21:41
pero apareció el director con un hombre de unos 30 años,
00:21:45
moreno, ojos verdes, barba de tres o cuatro días.
00:21:48
Fue un auténtico flechazo, o al menos por mi parte.
00:21:52
No era especialmente atractivo, pero había algo en él que a mí me llamaba la atención.
00:21:56
El director nos explicó que María José había tenido un pequeño incidente
00:22:00
Se había lesionado la rodilla, no era muy grave
00:22:05
Pero este curso no iba a poder dar clases
00:22:08
El profesor que la iba a sustituir se llamaba Rafael
00:22:10
Aunque él mismo nos dijo que le podíamos llamar Rafa
00:22:14
A mí al principio me dolió mucho lo de María José
00:22:16
Era, es una gran profesora
00:22:20
Amaba la literatura y la profesión de maestra y eso se notaba
00:22:23
A mí me encantaban sus clases
00:22:27
Empezamos las clases con Rafa
00:22:28
Personalmente no llevo muy bien los cambios
00:22:31
Cuando me acostumbro a una persona
00:22:34
Me cuesta mucho adaptarme a otra distinta
00:22:35
Pero con el tiempo
00:22:38
Me di cuenta de que había algo en Rafa
00:22:39
Que me cautivaba
00:22:42
No sé, era algo hipnótico
00:22:43
Cómo se expresaba
00:22:45
Cómo nos transmitía sus conocimientos
00:22:46
Su forma de enseñar me llamaba mucho la atención
00:22:48
Como yo amaba la literatura
00:22:51
Procuraba no faltar mucho a sus clases
00:22:53
y llevar todos los trabajos al día.
00:22:56
Rafa se dio cuenta de lo mucho que me interesaba por su asignatura
00:23:00
y como en mi clase no había muchos más con estas cualidades,
00:23:03
cuando terminaban las clases, Rafa y yo salíamos los últimos
00:23:07
comentando los autores y las obras que nos cautivaban.
00:23:10
Pero poco a poco me fui dando cuenta de que había algo más.
00:23:14
Me había enamorado de mi profesor.
00:23:18
Era así, mi mente no quería reconocerlo,
00:23:20
conocerlo, pero mi corazón me confirmaba que efectivamente sentía algo por él. Tal era mi
00:23:22
fijación por Rafa que un día me colé en la sala de profesores y copié su horario. Yo iba a esas
00:23:29
horas y así podía verle más. Yo llevaba a Estidilio en secreto, solo mi mejor amiga Laura lo sabía y
00:23:35
como era más atrevida que yo, no sé cómo, provocaba encuentros fortuitos entre ambos. Laura me decía
00:23:42
que lo mío no era normal, que estaba loca, que me quitara esa ilusión que tenía por mi profesor,
00:23:48
que me iba a llevar una decepción. Pero yo, cegada de amor, no le hacía caso. Un día al llegar a
00:23:53
clase vi que Rafa había cambiado de coche. Normalmente traía uno pequeño y blanco. No se
00:24:00
la marca porque no entiendo mucho de coches, pero era evidente que Rafa no había venido en el mismo
00:24:05
en el que venía siempre. Más que nada porque ese día se bajó de un coche grande y rojo, conducido
00:24:09
por una mujer. Este último detalle cambió totalmente mi manera de ver a Rafa. La sangre
00:24:15
se meló y mi corazón era incapaz de asimilar lo que mis ojos estaban viendo y lo que un rato más
00:24:21
tarde se confirmaría. Entramos en clase cuando Rafa comenzó a hablar. Buenos días, chicos,
00:24:28
perdonad el retraso, pero esta mañana no me arrancaba el coche y me ha tenido que traer mi
00:24:35
mujer, explicó. Mi mujer, mi mujer, mi mujer. No dejaba de repetir mi mente. Rafa continuaba
00:24:39
hablando, pero yo ya no escuchaba. Debía notar algo raro en mi rostro, porque me preguntó si me
00:24:47
encontraba bien. Rápidamente intenté recomponerme y disimular. Desde ese momento le vi de una manera
00:24:53
totalmente distinta, simplemente como profesor. Pero nunca olvidaré esta secreta, aunque no
00:24:59
recíproca historia de amor. Muchas gracias Cris por este estupendo relato de amores secretos y
00:25:05
muchas gracias Silvia por tu delicada lectura. Proseguimos en esta ocasión con Fernando Gutiérrez,
00:25:12
quien nace para que su madre descanse. Solo en la soledad encuentra compañía, muchas ilusiones y
00:25:18
proyectos en la cabeza, pero ni un euro en el bolsillo. Posiblemente este año tampoco se
00:25:26
matriculará en antropología social. Quiere hacer solo lo que le dé la gana, justo o
00:25:32
injusto, legal o ilegal. ¿Qué más da?
00:25:37
Esta historia mía puede ser una historia de amor. Pero el amor es un sentimiento y
00:25:41
explicar lo que es un sentimiento es tan difícil como explicar que es una poesía. Mi mejor
00:25:46
poesía eres tú. Yo tuve una luna rosa, un pez azul y un amor invisible. Bajo el manto
00:25:54
de un malentendido amor se convirtió en mi obsesión y yo en su vida de escape. Con mis
00:26:01
quince años y los diecisiete de ella, aprendí cómo la pasión puede ser humillante y transfigurar
00:26:07
la ilusión en vergüenza. La primera ocasión en que Manuela me invitó a su cama, me martirizó
00:26:13
con indicaciones de cómo quería que lo hiciera, y lo hizo como si yo un tutorial de tutu fuese.
00:26:19
Pasada la bonedad de la didáctica, dio la señal de comenzar y cuando todo estaba listo, me sentí terriblemente ridículo al oírla decir, quítate los calcetines, idiota
00:26:25
Continuamente robé sin conseguir la hospitalidad de su corazón, siempre estuve enamorado de ella, pero solo conseguía su atención cuando me decía, hazme feliz
00:26:38
Su pecho dejó de albergar un corazón y en su lugar germinó una blanca amapola
00:26:48
Que no dejaba de resumir resina y a partir de ahí se convirtió en una adicción para mí
00:26:54
El tiempo transcurría rápidamente
00:27:00
Mientras yo seguía enamorado actuando como un simple becario
00:27:03
Ella era feliz en su cátedra
00:27:07
Nuestra relación pasó a ser parte de una sociedad anónima
00:27:09
con demasiados socios, de la que yo solo poseía una acción que no me otorgaba derecho a voto.
00:27:13
Una noche el Consejo de Administración me despidió y Manuela Apática miraba mi luna rosa mientras yo abandonaba la sede social.
00:27:21
Hoy, años después de mi despido, sin duda improcedente, sentado en la mesa de un bar alimentando mi dulcera con una copa de coñac barato,
00:27:31
leo en el periódico que Manuela
00:27:40
y Manuela se han casado
00:27:42
con un soplagaitas habitual
00:27:44
del papel cuché
00:27:46
mis sentidos se contaminan
00:27:48
por los celos y la envidia
00:27:50
a partes iguales
00:27:52
sería ridículo never que he sido enamorado
00:27:54
de aquella a la que a cambio de su pasión
00:27:56
otorgué mi inexperiencia
00:27:59
sigo sus andanzas
00:28:01
a través de la prensa
00:28:03
mi guitarra dulce abrama
00:28:05
con cada palabra que leo
00:28:06
su enlace no va bien
00:28:07
Lo sé porque cuando está cabreada lo manifiesta tocándose al hombro izquierdo con la mano derecha y así es como aparece en todas las fotos desde hace meses.
00:28:10
Su consorte es un tipejo que mezcla continuamente español e inglés con voz de utilizar un aparato de ortodoncia y que seguramente se acuesta con los calcequines puestos.
00:28:20
El próximo día 21 volverá a la ciudad que vio crecer nuestro dominio sobre la lujuria.
00:28:31
Ese mismo día la visitaré en su chalet minimalista
00:28:36
De formas geométricas, enormes cristaleras siempre limpias
00:28:41
Césped del viejo Wembley recién cortado
00:28:45
Piscina de arena con agua salada
00:28:47
Y cama balinesa con toallas de Gucci
00:28:49
Aquí estoy, en el solario, a la espera de mi amada
00:28:52
Por fin la veo acercándose, sonriente
00:28:56
Y moviendo las caderas con una cadencia que eleva mi testosterona hasta niveles del desborde
00:29:00
Siento como el tiro de mi pantalón se estrecha.
00:29:06
Manuel, al verlo, sonríe.
00:29:09
Y como hace años, me siento ridículo.
00:29:12
Para salir del apuro, le pregunto qué ha hecho estos años.
00:29:15
Vivir, responde.
00:29:19
¿Y tú?
00:29:20
Morir pensando en ti.
00:29:21
Sigue siendo romántico.
00:29:23
Por cierto, acabo de quedarme con toda la pasta de mi marido.
00:29:25
¿Has dejado a Braga en las soplaguitas?
00:29:28
Pues claro, ese idiota no se merece nada de lo que tiene.
00:29:30
Piensa que le pertenezco y yo no soy propiedad de nadie.
00:29:34
Me mira, me rindo.
00:29:38
Con gesto pícaro me señala la cama balinesa.
00:29:40
No me hago el estrecho.
00:29:44
Las toallas de Gucci necesitan un nuevo planchado.
00:29:45
El correcional capitalino de mujeres da cobijo a quien actuó para salvaguardar su libertad.
00:29:49
En tan solo 17 días, Manuela cambia la piscina de arena por una ducha sin alcachofa
00:29:55
Y Gucci por el economato carcelario. Desde entonces, todos los jueves de 11 a 2, con mi pez azul, visito el correccional para el vis-a-vis al que tiene derecho Manuela. Se apropió de mi luna rosa, de mi pez azul y de mi amor invisible. Sí, pudo ser una historia de amor, pero tú a lo tuyo, chaval, oigo lo que me dice Manuela.
00:30:02
Muchas gracias, Fernando, por este apasionado relato de lunas, peces y lujuria.
00:30:26
Y como broche final presentamos ahora a otra de las escritoras del grupo. Su nombre es Silvia, su apellido Rocha, madrileña de nacimiento y castellana de corazón.
00:30:34
Imagina, busca y disfruta con la sensibilidad en todos sus formatos. La danza ha sido parte de su formación y retomarla hace unos años ha sido para ella como volver a sentirse en casa.
00:30:47
Estudió turismo y acabó en el mundo de la aviación,
00:30:59
por menor que le ha permitido ver, oler y sentir por otras ciudades y por distintas culturas,
00:31:02
siendo precisamente eso lo que más le motiva de la vida,
00:31:08
emociones a flor de piel siendo una romántica clandestina.
00:31:12
Esta historia mía pudo ser una historia de amor.
00:31:20
Dejadme que os cuente.
00:31:24
El día comenzó con la sensación de que algo insólito me pasaría.
00:31:25
Tenía esa intuición.
00:31:29
Bajé las escaleras de la estación de metro tratando de esquivar a toda esa gente tan molesta que va por la vida sin prisa, lentos en sus movimientos y en sus formas.
00:31:31
Jugaba cada mañana a mejorar mis tiempos, o al menos igualarlos, en mi ranking diario de la aventura que supone subirse al metro de Madrid en hora punta.
00:31:40
Una gymkhana militar por el desierto pudiera resultar más fácil a veces que conseguir lo que yo me proponía.
00:31:50
No es por alardear, pero soy bastante rápida en mis movimientos. Me manejo como pez en el agua, subiendo y bajando escaleras, sorteando gente, andando a ritmo de maratoniana, escabulléndome cual lagartija de los taponamientos de masas.
00:31:55
Y todo eso subida a mis zapatos de tacón, que me dan la seguridad y aunque parezca mentira, una estabilidad que uso para mantenerme ágil cada vez que planto el pie y además los hago sonar. Ese sonido me encanta.
00:32:10
una vez que llego al andén
00:32:21
intento mejorar siempre mi puesto
00:32:23
y creedme que aquí se requiere de una capacidad muy fina
00:32:25
hay que convertirse en algo parecido a un ninja
00:32:29
ser rápida, liviana, ligera
00:32:31
y todo a la vez con mucha sutileza
00:32:33
disimulando en cada movimiento
00:32:35
para no llamar la atención
00:32:37
y colocarme en primer puesto
00:32:38
a partir de ahí se supone que la entrada al vagón
00:32:40
está asegurada
00:32:43
pero ese día algo cambió
00:32:44
y sorprendentemente no lo vi venir
00:32:47
Cuando se abrieron las puertas del vagón y me eché a un lado para dejar salir a los viajeros de esa estación, noté una fuerza extraña, algo sujetándome del abrigo, y ejercía tal resistencia que no me permitía moverme ni avanzar.
00:32:50
Cuando empezaron a subir el resto de viajeros, empecé a ponerme nerviosa al darme cuenta que estaba perdiendo posiciones. Miré hacia atrás para descifrar qué era aquello que me retenía tan insistentemente y me topé con un brazo.
00:33:03
continué con la mirada para ver a quién pertenecía esa extremidad tan inoportuna y descubrí que se
00:33:15
trataba de un hombre alto y apuesto me miraba y sonreía a la vez con bastante picardía notaba
00:33:21
perfectamente cómo su mirada me retaba pero qué narices significa todo esto intenté zafarme de su
00:33:27
brazo sin ningún éxito y cuando me giré para decirle que parara de hacer eso me agarró con
00:33:34
más fuerza y me atrajo hacia él diciendo en voz bien alta, amor, no tengas tanta prisa,
00:33:39
dejemos pasar primero al resto. No fue tanto lo que dijo que también, sino el tono con
00:33:45
el que lo hizo, cándido, burlón y cargado de ironía. No pude evitar sentirme avergonzada
00:33:51
y bastante confundida. Aún no sabía si me estaba humillando porque me había observado
00:33:57
desde su condición de hombre alto o se trataba de un loco maníaco. Mi reacción fue ignorarle
00:34:02
y seguir adelante con mi plan de siempre. Me subí al tren y con un solo paso me quedé atrapada entre
00:34:08
el resto de viajeros y las puertas del vagón, que se cerraron rozándome. El hombre alto se puso a mi
00:34:13
lado y nos giramos de manera simultánea sobre nuestros talones, quedándonos justo enfrente de
00:34:19
las puertas del tren. Decidí no mirarle, pero notaba sus ojos atravesándome. Le tenía tan cerca que
00:34:25
podía establearle. Olía limpio, recién duchado, un perfume común, quizá fuese solo el desodorante.
00:34:32
La intriga me pudo y le miré brevemente, pero él no apartó la mirada, la cual era demasiado intensa. Me sentí invadida y me ganó la batalla. Bajé los ojos de nuevo al frente y cambié la perspectiva observándole a través de la imagen que reflejaba el cristal del vagón.
00:34:39
De nuevo me topé con su mirada, pero esta vez aguanté el reto estoicamente y pude analizar
00:34:56
bien a mi contrario. Físicamente era bastante atractivo, tenía unas facciones muy angulosas,
00:35:01
la mandíbula bien marcada, ojos grandes y expresivos y una nariz recta y bastante pronunciada.
00:35:06
Sus labios fueron dibujando una tímida sonrisa de medio lado que me cautivó. No sabía qué
00:35:13
me estaba pasando, pero el rechazo que sentía tan solo un par de minutos antes había desaparecido
00:35:18
por completo, y ahora no podía dejar de admirarle. Y como si presintiera que el hombre alto pudiera
00:35:24
leerme la mente, me sonrojé, y se me escapó una sonrisa nerviosa, me atusé con cierto nerviosismo
00:35:30
el pelo y desvíe de nuevo la mirada. Entonces hubo movimiento. El hombre alto dio un paso hacia mí,
00:35:37
acercándose, y nos quedamos rozándonos los cuerpos. Me quedé muy quieta, paralizada, casi aguantando
00:35:43
la respiración sintiéndole tan cerca. ¿Cómo era posible sentir esa clase de magnetismo
00:35:50
tan fuerte con un auténtico desconocido? Lo siguiente que recuerdo fue el frenazo del
00:35:54
tren, un poco más brusco de lo normal, lo que me hizo perder estabilidad y chocar violentamente
00:36:00
contra el hombre alto, que como si lo tuviese todo previsto, me sujetó con sus brazos heroicamente
00:36:05
quedando abrazados y apoyados contra la puerta. Sentía su aliento tan cerca que pude llegar
00:36:11
a apreciar un ligero aroma a café y lo único que pensaba era cómo sería un beso suyo. Fueron
00:36:17
quizás cinco segundos, pero posiblemente los mejores de mis últimos tiempos. El vagón frenó
00:36:24
del todo y el hombre alto y yo nos incorporamos disimulando y sonriendo con timidez. El pitido
00:36:30
de apertura de la puerta me hizo regresar a mi escenario y mirar a mi alrededor, pero cuando
00:36:36
regresé la mirada, esa historia de amor se había esfumado en la estación de Goya. Así desapareció
00:36:41
el que podía haber sido el ladrón de mis sentimientos.
00:36:46
Me quedé con una sensación de vacía inmensa,
00:36:49
pensando en lo que pudo haber sido,
00:36:52
pero afortunadamente me duró poco el duelo.
00:36:54
Tomé conciencia de la realidad cuando me di cuenta
00:36:57
que mi bolso estaba abierto y mi monedero en paradero desconocido,
00:37:01
mi ladrón maldito.
00:37:05
Muchas gracias, Silvia, por esta magnífica historia de amores y robos.
00:37:08
Y tras este derroche de creatividad y talento,
00:37:13
damos por finalizada esta primera entrega del podcast del taller de escritura creativa del
00:37:16
CEPA para Cuellos de Jarama. Tenemos la esperanza y la ilusión de que hayan disfrutado escuchando
00:37:21
estas historias tanto como sus autoras y autores lo han hecho al crearlas y al compartirlas
00:37:26
generosamente con ustedes. Cuídense y sean felices.
00:37:32
- Subido por:
- Cepa paracuellos
- Licencia:
- Todos los derechos reservados
- Visualizaciones:
- 4
- Fecha:
- 11 de junio de 2024 - 21:43
- Visibilidad:
- Público
- Centro:
- CEPAPUB PARACUELLOS DEL JARAMA
- Duración:
- 37′ 41″
- Relación de aspecto:
- 1.78:1
- Resolución:
- 1280x720 píxeles
- Tamaño:
- 721.44 MBytes