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HFIL 2BACH - 44 El problema del ser humano en Hannah Arendt - Contenido educativo

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Subido el 16 de diciembre de 2023 por César Pedro P.

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La visión del ser humano en la obra de Hannah Arendt

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Sus reflexiones sobre la antropología filosófica, Hannah Arendt habla siempre de la condición humana y no de la naturaleza humana, puesto que considera que los seres humanos no tenemos una naturaleza fija y originaria. Los seres humanos podemos configurar, al menos en parte, eso que somos. 00:00:01
Siguiendo Aristóteles, Arendt distingue dos formas diferentes de vida, la vida activa y la vida 00:00:20
contemplativa. De la primera se ocupa en un libro que se titula La condición humana y de la segunda 00:00:26
en otra obra que se llama La vida del espíritu y que dejó inacabada porque estaba trabajando en 00:00:32
ella cuando le sorprendió la muerte. La vida activa guarda relación con lo que hacemos e incluye, 00:00:39
según Hannah Arendt tres dimensiones distintas de la realidad humana, la labor, el trabajo y la 00:00:45
acción. Estas son las condiciones, según Hannah Arendt, en las que se da la existencia humana en 00:00:51
la Tierra. La labor está vinculada a la producción y al consumo de lo que necesitamos para el 00:00:57
mantenimiento y la continuidad de la vida. Para sostener nuestra existencia biológica necesitamos 00:01:03
producir alimento, vestirnos, cuidar de los niños y de los enfermos y de los ancianos, por ejemplo, 00:01:09
la condición humana a la que está ligada la labor es la vida. El espacio en el que se desarrolla la 00:01:16
labor es el hogar, la familia, el mundo de la vida privada. Lo privado incluye la expresión, 00:01:22
según Hannah Arendt, de las emociones y de los sentimientos, que se trata de asuntos que no 00:01:29
conviene mostrar a los demás. El problema es que en este espacio privado ligado al hogar y la 00:01:34
familia no hay, según Hannah Arendt, verdadera libertad. Es un espacio en el que todo está 00:01:41
sometido a la necesidad. Tampoco hay igualdad. Es un terreno marcado por la violencia y por la 00:01:47
coacción. Por eso para Hannah Arendt en la labor, en el espacio privado, en la familia y en el hogar 00:01:53
no se puede dar una auténtica libertad. Por ese motivo, en la antigua Grecia, la labor era destinada 00:02:00
a las mujeres y a los esclavos, que no eran auténticamente ciudadanos porque carecían de 00:02:08
libertad. La segunda dimensión de la vida activa es el trabajo. El trabajo es aquella actividad 00:02:13
humana que se encarga de fabricar objetos que perduran en el tiempo, esos objetos que conforman 00:02:20
el mundo en que vivimos. Las personas no vivimos directamente en la naturaleza, sino que vivimos 00:02:26
en un mundo configurado por edificios, muebles, objetos, herramientas. Todo esto es producto del 00:02:31
trabajo. El trabajo incluye, por lo tanto, tareas como la construcción, la artesanía, los oficios. 00:02:38
Es el ámbito de la creación y de la utilización de artefactos, de obras humanas que nos sobreviven. 00:02:46
la condición humana a la que está ligada esta dimensión del trabajo es la mundanidad es decir 00:02:52
el hecho de que los seres humanos habitamos una realidad constituida por objetos y por 00:02:59
instituciones que conforman nuestro mundo porque las instituciones también son producto del trabajo 00:03:05
por ejemplo un parlamento la acción es la actividad mediante la cual los seres humanos 00:03:10
interactuamos y nos manifestamos. Mediante la acción, los seres humanos se revelan a sí mismos 00:03:16
como agentes a través de lo que hacen y de lo que dicen. Con la acción y con el discurso, 00:03:23
una persona muestra quién es y lo hace ante los demás. Por eso la acción es el ámbito auténtico 00:03:29
de la libertad, según Hannah Arendt, aquel espacio en el que nos presentamos como diferentes a otros, 00:03:35
el espacio en el que construimos nuestra propia identidad. La condición a la que está ligada la 00:03:41
acción es la pluralidad de la realidad humana, porque las personas somos distintas, cada uno es 00:03:48
diferente de los demás y esa identidad singular que nos individualiza se manifiesta en la acción, 00:03:54
cuando hablamos y actuamos frente a los otros. Revelar con nuestras acciones quienes somos es, 00:04:00
en cierto modo una segunda manera de nacer, una especie de inicio que nos hace aparecer 00:04:06
entre los demás. A esto Hannah Arendt lo llama la natalidad. La natalidad entendida de este modo 00:04:13
es el principio, el inicio de nuestra auténtica revelación como personas que nos permite romper 00:04:19
con el pasado, alumbrar algo nuevo, porque para Hannah Arendt la acción es el espacio de la 00:04:26
libertad. La acción es libre, impredecible y además irreversible, porque no podemos deshacer lo que 00:04:32
hemos hecho o dicho. Por ese motivo, la acción es el espacio de la libertad, el espacio en el que se 00:04:40
expresa, según Arendt, lo más propiamente humano de nuestra condición. La función principal de la 00:04:46
acción es, por tanto, expresiva y no instrumental. Esto quiere decir que en la acción lo que hacemos 00:04:53
es mostrar quiénes somos. No se trata de que utilicemos la acción para conseguir algo más. 00:04:58
La acción es un fin en sí mismo que sirve para configurar el tipo de persona en el que nos hemos 00:05:04
convertido al actuar. Esa acción además genera una responsabilidad, una responsabilidad que siempre 00:05:09
es individual. Pese a que cada uno de estos tres espacios debería tener un espacio propio, en las 00:05:16
sociedades contemporáneas se ha producido un desequilibrio porque la labor ha invadido, 00:05:23
según Hannah Arendt, todo el terreno de la experiencia humana. La esfera económica en 00:05:28
el mundo contemporáneo se ha adueñado de la política y lo privado se ha confundido con lo 00:05:34
público. La sociedad de masas es una sociedad del consumo en la que lo más importante, la actividad 00:05:39
central, consiste en producir y en el tiempo de descanso en consumir. Así que es imposible 00:05:45
encontrar un sentido verdadero a la existencia humana, porque falta en este tipo de sociedad 00:05:51
ese espacio de interacción libre y humano que correspondería a la acción. Además, en estas 00:05:56
sociedades modernas, el individuo, pese a vivir junto con los demás, en el fondo está solo. Se 00:06:02
trata de sociedades atomizadas, y esas sociedades donde el individuo está aislado son propicias a 00:06:08
la dominación, abriendo así el espacio a la aparición del totalitarismo, que es un fenómeno 00:06:14
al que Hannah Arendt dedicó gran atención en sus reflexiones sobre la política. Como hemos visto, 00:06:20
la labor, el trabajo y la acción son tres dimensiones de la vida activa, pero Hannah Arendt 00:06:27
también se ocupó de la vida contemplativa, en esa obra, La vida del espíritu, que estaba escribiendo 00:06:32
cuando le sorprendió la muerte. La vida contemplativa, según Hannah Arendt, no se centra en la actividad 00:06:38
exterior, sino que se centra en el ejercicio de nuestras facultades mentales. Para Arendt, la mente 00:06:44
o el espíritu es algo distinto del alma y es importante señalar la diferencia que hay para 00:06:51
ella entre estas dos cosas. El alma, dice Arendt, es la sede de nuestras emociones y pasiones, lo que 00:06:57
nos permite experimentar, por ejemplo, rabia, alegría o tristeza. Pero si se trata de la sede 00:07:04
de las emociones, el alma es pasiva. Las emociones son cosas que nos suceden, que nos sobrevienen, 00:07:10
que nos pasan. En cambio, la mente o el espíritu es activa, porque es la sede del pensamiento, 00:07:16
de la voluntad y de la acción, que son tres cosas que hacemos. Pensar, dice Hannah Arendt, 00:07:23
es algo muy distinto de conocer. Conocer consiste en captar lo que las cosas son. La función 00:07:31
cognitiva es intencional, lo cual quiere decir que siempre que pensamos, pensamos en algo, 00:07:37
siempre que conocemos, conocemos algo. Sin embargo, el pensamiento, a diferencia del 00:07:44
conocimiento, no es intencional, sino que es reflexivo. Cuando pienso en rigor no pienso 00:07:51
en algo, sino que pienso sobre algo. Pensar requiere tomar distancia del mundo para cuestionarlo, 00:07:57
por lo que supone una especie de desdoblamiento interno, mediante el cual yo soy capaz de 00:08:05
dialogar conmigo mismo. Esta es la definición que daba el propio Platón acerca de lo que era 00:08:09
pensar. Platón define el pensamiento como el diálogo silencioso que uno mantiene en su interior 00:08:15
consigo mismo. Para Hannah Arendt el pensamiento es lo mismo. Es una especie de desdoblamiento en 00:08:22
el cual hablamos con una voz interior con nosotros mismos. Así que el pensamiento es reflexivo y no 00:08:28
e intencional. El pensamiento además para Hannah Arendt está asociado a la natalidad, es decir, a 00:08:36
la capacidad de hacer que surja algo nuevo e imprevisto. Porque el pensamiento aparece cuando 00:08:42
una voz dentro de mí se alza para mostrar la diferencia con lo que en un primer momento yo 00:08:48
daba por válido. Para que el pensamiento progrese entonces tengo que estar dispuesto a escuchar esta 00:08:53
voz interior, esta voz que me convierte en un dos en uno. Pero para que el pensamiento gane en 00:08:59
objetividad e imparcialidad además ha de expresarse en público, de manera que los otros puedan 00:09:06
criticarlo. La segunda de las facultades asociadas a la vida contemplativa, según Hannah Arendt, es la 00:09:11
voluntad, que es el ámbito del querer, y por ello la voluntad está ligada a la moralidad. Para Arendt 00:09:19
la moralidad consiste en la coherencia interior, en la ausencia de contradicción entre las dos 00:09:26
voces que dialogan dentro de mí mismo cuando me desdoblo en un dos en uno. El peor mal, por ello, 00:09:33
es la división interna que se produce cuando yo tengo que reprenderme a mí mismo por las cosas 00:09:41
que he hecho y que he dicho sin escuchar mi voz interior. Por último, el juicio también está 00:09:47
relacionado con la moralidad, porque entre otras cosas nos permite valorar lo que es correcto o 00:09:55
incorrecto. Pensando, me doy cuenta de quién sería yo al elegir una opción u otra, de modo que al 00:10:00
emitir un juicio moral, el individuo se elige a sí mismo. Elige el tipo de persona en el que se 00:10:06
quiere convertir haciendo una acción u otra, pero también elige a los otros, las personas con las 00:10:12
que quiere vivir. Deseo convivir con aquellos que sean capaces de pensar y juzgar el mundo 00:10:18
conjuntamente conmigo, mediante la construcción de acuerdos. Esto, dice Hannah Arendt, no garantiza 00:10:23
el acierto, porque nos podemos equivocar. No nos queda más remedio que pensar sin barandillas, 00:10:30
lo cual quiere decir arriesgarnos, no tener seguridades, para escoger lo que nos parece 00:10:36
correcto aunque no tengamos garantía de éxito. Esta incertidumbre no puede llevarnos a dejar 00:10:42
de pensar, puesto que el pensamiento es lo que guía la acción y nuestra acción afecta a los 00:10:48
demás. De hecho, la consecuencia directa de no pensar es caer en el mal, que es justamente lo 00:10:54
que le pasó a Adolf Eichmann, un ejemplo muy claro de a qué nos puede llevar la incapacidad de pensar. 00:11:01
Idioma/s:
es
Autor/es:
César Prestel
Subido por:
César Pedro P.
Licencia:
Reconocimiento - No comercial - Compartir igual
Visualizaciones:
374
Fecha:
16 de diciembre de 2023 - 14:03
Visibilidad:
Público
Centro:
IES CERVANTES
Duración:
11′ 11″
Relación de aspecto:
1.78:1
Resolución:
1280x720 píxeles
Tamaño:
646.52 MBytes

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